Imagen reciente de un cebadero de corderos de La Solana                                                                                          Foto: GACETA

            Javier Ruiz

El sector ganadero también esta viviendo con mucha incertidumbre la crisis sanitaria. Así lo ha manifestado el ganadero solanero y secretario local de UPA, Alfonso Serrano, destacando que, al estar la hostelería cerrada, el consumo ha experimentado un enorme descenso. Todas las ventas que se podían haber realizado en estas fechas en la restauración para banquetes, bodas, comuniones, han quedado paralizadas “y eso es un palo muy fuerte para todo el sector, teniendo un gran número de corderos acumulados a los que no se le puede dar salida”.

Es una situación complicada, pues además de todos los problemas se suma el de los cebaderos, que están llenos. De por sí, la situación ganadera no es halagüeña, y ahora con el COVID-19 se empeoran más las cosas, “deseamos que esto se acabe pronto, pues es una cadena en la que todos estamos implicados, con perjuicios importantes”. De momento, con todo el género lo único que queda “es que el cordero siga mamando de la madre, pero eso supone pérdidas muy grandes”. Incluso en el tema de quesos, hay pequeñas y medianas industrias en la que algunos ganaderos han decidido no recoger la leche “pues si no hay venta, no hay recogida”, asegura Serrano.

Un problema añadido es que la leche no aguanta más de tres días, por tanto, el sacrificio del ganadero es aún mayor, generándose más pérdidas al tener que tirarla en algunos casos. Todo esto que “además ha pillado en una temporada alta de leche y crianza de corderos”. En cuanto a necesidades y peticiones que trasladan los ganaderos para poder solventar el problema, destacan ayudas acopladas, promoción y consumo, pues en caso contrario algunas explotaciones se verían abocadas al cierre.

Por otro lado, puso en valor y agradeció la iniciativa de la consejería de agricultura, que como según anunció su responsable, Francisco Martínez Arroyo, iniciará una campaña de promoción para consumir cabritos y cordero manchego que cuenta con su IGP (Indicación Geográfica Protegida), un signo utilizado para designar un producto agrícola que posee un origen geográfico determinado, que cuenta con calidad y reputación que se debe a dicho lugar de origen.

Alfonso Serrano, desea que la crisis sanitaria que se está sufriendo pase pronto, que la restauración pueda volver a su normalidad, que la ciudadanía salga a la calle, y entre todos solucionar esta grave situación. La ganadería como la agricultura son sectores muy castigados, además desde hace unos meses “la situación no levanta y la cadena se amplía a la vendimia o aceituna, entre otros”. Se espera que todo pase, salvar lo que se pueda, y la petición de que una vez se vaya normalizando, se fomente y consuman productos de nuestra tierra y, por supuesto, nuestra zona “no es necesario que entren productos de otros países cuando aquí tenemos una gran producción y calidad, ayudando así a que este sector pueda sobrevivir”, concluye Serrano.

Cecilio Gª Cervigón es un conocido ajedrecista ciego de La Solana

           Aurelio Maroto

          Al abrigo de Los Andes se extiende Chile, un largo trazo de lápiz en el mapa que comienza a sufrir el azote del Covid-19. Tras las revueltas por la llamada ‘Revolución de los 30 pesos’, el virus global está dando el golpe de gracia a un país que hasta no hace mucho presumía de ser un pequeño oasis en la llamada América Latina. Un solanero acaba de regresar de allí en un vuelo fletado por el consulado español en Santiago, la capital andina. Se llama Cecilio García-Cervigón y es uno de los mejores ajedrecistas de España, a pesar de ser ciego.

         No estaba allí disputando ningún torneo, qué va. Vivía los tres meses de estancia máxima como turista junto a su actual pareja, Oriana, en un ir y venir constante entre Chile y España en los últimos años. Había llegado el 18 de diciembre y tenía que regresar el 11 de marzo, pero pidió prórroga para volver el uno de abril y así poder traerse a su pareja, también deficiente visual, y a su madre. Objetivo vano. El propio consulado español se puso en contacto con él para confirmarle que volaría a España, pero solo. Cecilio García-Cervigón, que agradece el trato recibido por el consulado, suplicó a la propia cónsul en persona viajar con ellas, sin éxito. “Me dijo que era imposible, incluso aunque diera su autorización, ya que no le dejarían entrar en España”. El problema es que no están casados y su relación, aunque consolidada y larga ya en el tiempo, carece de soporte legal.

Cecilio lo veía venir. Cuando llegó, en diciembre, ya había un lío muy serio. “Se veían barricadas en las calles, saqueos en los supermercados o incendios de farmacias”. “Santiago era un desastre”. Atrás había quedado el Chile próspero donde todo el mundo tenía trabajo y había paz social. Pero era una prosperidad cogida con pinzas ya que los sueldos no superaban los 300 euros de media, con bolsas de pobreza y, eso sí, una minoría empresarial pudiente que vivía a todo tren.

            La irrupción del coronavirus metió a la gente de nuevo en sus casas para “juntar un problema con otro, y no sé cuál será peor”, señala. Se refiere a la sanidad, que en Chile no es universal ni gratuita. “Allí todo funciona a base de pagar”. “Yo mismo fui a una farmacia a hacerme la prueba del azúcar –es diabético- y me costó 2.100 pesos -2,30-euros-“. Esa precariedad sanitaria fue, precisamente, lo que instó a su pareja a suplicarle que volviera a España. “Un día se arrodilló literalmente para pedirme que me viniera”, declara con emoción contenida.

“A mediados de marzo empezó a ponerse peor la cosa y el gobierno tomó medidas, entre ellas eltoque de queda”. Los militares patrullan con los fusiles entre las 10 de la noche y las 5 de la mañana”. Pero a las 5 y un minuto, la gran contradicción. “De repente se llenan los metros, los autobuses circulan a rebosar de gente y se ven grandes colas en cualquier sitio”. “Te preguntas para qué sirve el toque de queda”. Entre tanto, estaba al tanto de lo que sucedía en España mediante la radio. “Escuchaba todas las emisoras, incluida Radio Horizonte, aunque fueran las 6 de la mañana”.

            Los datos oficiales, tanto de contagiados como de muertos, sitúan a Chile en una situación todavía óptima si la comparamos con los países más castigados, caso de España. Hasta este domingo se habían declarado algo más de 4.000 casos y apenas 30 fallecidos. Sin embargo, la realidad podría ser muy diferente. Camino del aeropuerto, Cecilio García-Cervigón comentó con el taxista que los números en Chile no eran comparables con los de España. “No se lo crea usted, tengo un amigo en una funeraria y no dan abasto a enterrar a gente”, respondió.

            Ahora, desde la tranquilidad relativa de su casa en La Solana, cuenta las horas para volver a ver a Oriana. Ella y su madre siguen allí, en el corazón de Santiago de Chile, viviendo la partida de ajedrez más difícil de sus vidas. Es una historia más a cuenta del coronavirus. Una historia que ojalá acabe bien, pero que refleja la realidad de un mundo que ya nunca será igual.

La mujer fue detenida en estas inmediaciones                        Foto: GACETA (archivo)

         Aurelio Maroto

La Policía Local de La Solana detuvo el viernes, día 3 de abril, a una mujer de 59 años de edad por alterar el orden público en el interior una tienda de alimentación situada en la calle Carrera. Según ha informado el cuerpo policial,  tiene 59 años y era reincidente en el incumplimiento de las medidas decretadas por el estado de alarma. Radio Horizonte ha podido saber que la mujer había sido desalojada en un primer momento por los agentes, pero que después regresó con muy malas formas y comenzó a increpar a viva voz a todo el mundo. Fue inmovilizada por los propios empleados hasta que volvió la policía y procedió a detenerla. La Guardia Civil de La Solana se encargó de completar las diligencias. Se trata de la segunda detención desde que entró en vigor el decreto gubernamental.

La Policía Local realizó un total de 7 controles de movilidad durante este pasado fin de semana, en los que identificó a un total de 87 personas, entre conductores y peatones, levantado un total de 5 denuncias administrativas. Entre los motivos de las denuncias destaca el caso de dos hombres que circulaban por la calle Navas de Tolosa y “venían de comprar dos litronas”. También se denunció a un joven que había salido con su vehículo con el único de fin de “dar una vuelta por la localidad”.

Desde que comenzó el estado de alarma el pasado 14 de marzo, la Policía Local ha identificado a 327 personas, tramitando un total de 35 denuncias por infracción de la Ley de Protección de la Seguridad Ciudadana, con 2 detenidos.

Quejas por molestias

La actual situación de confinamiento está provocando que se reciban más llamadas de las habituales por molestias de ruido, en especial a determinadas horas nocturnas. La Policía Local pide a la ciudadanía respetar las normas de convivencia, ya que hay personal sanitario, de seguridad, de alimentación, etc., que doblan turnos, y personas mayores, niños o enfermos que también sufren estas molestias.

En relación a esas llamadas vecinales, la policía destaca 4 requerimientos indicando que había albañiles trabajando. Pero la Policía Local comprobó que eran obreros por cuenta propia -que sí pueden trabajar-, ya que las restricciones que introdujo el gobierno hasta el 9 de abril solo afectan a trabajadores por cuenta ajena.

Julián Simón -centro- en sus tiempos de alcalde, junto a Nemesio de Lara y Venancio Fernández              Foto: GACETA

              Aurelio Maroto

          A primera hora de la tarde de este viernes, día 3 de abril, hemos conocido el fallecimiento de Julián Simón González, que fuera alcalde de La Solana en la legislatura 1983-1987 y concejal durante una década. Tenía 73 años.

         Siempre ligado al Partido Socialista Obrero Español y maestro de profesión, su trayectoria política arrancó en el año 1979, coincidiendo con la primera legislatura de los nuevos ayuntamientos democráticos. Aunque ocupó el puesto número 7 en la candidatura ganadora, encabezada por José López Posadas, fue elegido segundo teniente de alcalde y acabó como primer teniente de alcalde, además de concejal de Educación.

          Consolidado como uno de los hombres de confianza de López Posadas, en la siguiente legislatura ocupó el puesto número 3, aunque el reelegido alcalde le volvió a otorgar la primera tenencia de alcaldía. El 23 de mayo tomó posesión aquella Corporación y fue nombrado concejal de Educación y Cultura. Pero la pronta muerte de López Posadas, acaecida el 16 de julio de 1983 tras una rápida enfermedad, lo convirtió en alcalde accidental. Finalmente, el 5 de septiembre de 1983 fue proclamado solemnemente nuevo alcalde de La Solana.

         Entre los principales hitos de su mandato destaca la inauguración de las primeras viviendas sociales en 1983, la apertura de las lagunas de oxidación en 1984 con la presencia del entonces ministro de Obras Públicas, Julián Campo, la creación de la Semana de la Zarzuela y su primera edición en 1984, y sobre todo la puesta en marcha del pantano Puerto Vallehermoso en el año 1987.

          Julián Simón -segundo por la izda- durante una visita de José Bono en octubre de 1987           Foto: GACETA     

          Julián Simón no optó a la reelección en el siguiente mandato (1987-1991), pero sí aceptó ser el número 2 de la candidatura encabezada por Nemesio de Lara, que renovó la mayoría absoluta socialista. Fue primer teniente de alcalde hasta que dimitió en el año 1989, abandonando definitivamente la política municipal.

Reacciones

         Las reacciones a la muerte de Julián Simón no se han hecho esperar, entre ellas un emotivo mensaje de Nemesio de Lara en redes sociales o un comunicado oficial de la Corporación Municipal, en el que expresa su “pesar unánime por esta pérdida tan relevante para nuestro pueblo”. La nota destaca la figura de Julián Simón como “un gran servidor público, como alcalde y como maestro” y anuncia un homenaje cuando las circunstancias lo permitan.

 La casualidad ha querido que su muerte se produzca un 3 de abril, el mismo día que se celebraron aquellas primeras elecciones en 1979. Descanse en paz.

Ofertas de trabajo por la falta de personal de enfermería y auxiliares de clínica

          Javier Ruiz

       El área de empleo del Centro de la Mujer, informa de la necesidad urgente de cubrir varios puestos de enfermeros y auxiliares de clínica para residencias de mayores y centro de discapacitados en La Solana, aunque también la petición se extiende a otros centros de localidades vecinas.

        Debido a la cantidad de solicitudes de personal desde distintos centros de atención a personas en situación de dependencia, se necesita personal para cubrir varias plazas. Ascen Mateos-Aparicio, técnico de empleo del Centro de la Mujer de La Solana, indica que la urgencia es máxima, “debido a la necesidad para atender a estas personas”.

         Los enfermeros y enfermeras que quieran trabajar deben tener el título de enfermería, o haber aprobado el EIR aunque no hayan sacado plaza, también estudiantes de último curso del Grado de Enfermería.

      En cuanto a los auxiliares de clínica, deben contar con experiencia en el puesto y alguna titulación sanitaria, como por ejemplo, grado medio de Atención Sociosanitaria; grado medio de cuidados auxiliares de enfermería; FPI en la rama clínica; certificado de profesionalidad en atención sociosanitaria a personas dependientes en instituciones sociales; acreditación profesional de la JCCM. Teniendo alguna de esas titulaciones pueden presentarse a los diferentes puestos de trabajo, que requiere de disponibilidad inmediata.

       Mateos-Aparicio, indica que el contrato es de forma inminente para cubrir las necesidades en esta situación de crisis, aunque en algunos casos se podrá extender para más meses e incluso después entrar en bolsa para tener una continuidad laboral. Las personas interesadas deben enviar el CV a la mayor brevedad posible en ‘Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo. ’, indicando en el Asunto ‘Puesto – La Solana’, para más información pueden contactar directamente con el centro de la mujer.

          El suceso se produjo en un domicilio de la calle Valencia

           Aurelio Maroto

          Un hombre de 61 años de edad fue hallado sin vida este jueves en su domicilio de la calle Valencia, en La Solana. Fueron los propios vecinos quienes avisaron a la Policía Local ante la sospecha de que podía suceder algo, ya que el hombre, que vivía solo, llevaba varios días sin dejarse ver.

         Según ha podido conocer Radio Horizonte por fuentes vecinales, los agentes se personaron en la vivienda a los pocos minutos y encontraron el cuerpo sin vida de esta persona en su salón. Después llegaron los servicios médicos, que certificaron la muerte y se procedió al levantamiento del cadáver en presencia de la Policía Judicial. Esas mismas fuentes indican que el fallecido tenía algunos problemas de movilidad y sufría del corazón. Pero se ignora la causa oficial del deceso y se ha abierto una investigación.