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Publicado: 09 Febrero 2015
Rafa Cort茅s, un delantero al que siempre se le espera Foto: Sebas Candelas
Aurelio Maroto
Por si alguien lo hab铆a olvidado, La Solana no tiene un depredador del 谩rea. Tiene dos. Naranjo estaba y sigue estando. Ahora, Rafa Cort茅s hace sonar el claxon y anuncia su llegada. M谩s vale tarde que nunca. El ariete solanero, tantas veces indolente, capaz de enfadar y enamorar en un instante, ha vuelto. O eso parece. Su hat-trick en Carri贸n, firmado en apenas media hora de inspiraci贸n, tritur贸 al rival para allanar el camino de un triunfo vital para las aspiraciones amarillas. Y lo hizo con profusi贸n de colores: el primero de cabeza, el segundo de oportunista y el tercero con una sutil vaselina. Es como si hubiera confirmado lo que ya avis贸 el domingo anterior contra el Munera, donde estuvo a punto de cortar las dos orejas y el rabo.
脕ngel Izquierdo, que no conoce a nadie cuando se trata de elegir el once titular, ha sido duro con Rafa en lo que va de temporada, haci茅ndole calentar mucho banquillo, pero mucho. Sin embargo, se hizo el loco cuando el delantero le afe贸 que lo sacara en el 煤ltimo minuto el d铆a del Zona 5. Es zorro viejo y sabe que puede necesitar al ariete, d铆scolo a veces, pero un diamante cuando est谩 en forma. Y parece que, por fin, est谩 fino f铆sicamente. Tal vez por eso oli贸 que pod铆a ser su d铆a y decidi贸 darle un puesto en el once, a煤n cuando Naranjo, insustituible, tambi茅n estaba en 茅l. La apuesta, valiente sin duda, le sali贸 redonda al t茅cnico. Rafa se encarg贸 de que fuera as铆. Es menester que haya 鈥渧uelto鈥 para quedarse.
La victoria en Carri贸n, remontando con solvencia el madrugador gol de Iv谩n (otra vez un gol tempranero), constituye un golpe de autoridad. Es un mensaje claro para los rivales, que tambi茅n exhiben v茅rtigo a las alturas, y un automensaje para los mismos jugadores. Deben darse cuenta de su potencial y, sobre todo, del enorme respeto que generan a sus rivales. Ninguno de los de arriba ha planteado partidos de ataque contra los amarillos. El Munera de hace una semana fue un buen ejemplo. La Solana impone, y La Moheda m谩s.
La cuesti贸n es que esa autoestima no se convierta en autocomplacencia. Lo primero traer谩 el 茅xito, lo segundo el fracaso. Siempre que las lesiones no diezmen, La Solana tiene cada d铆a m谩s papeletas para, como dice Jose L贸pez, 鈥渄ar un paso m谩s鈥. A un punto del ascenso directo, con un calendario para nada temible (casi todos los de arriba a煤n tienen que pasar por La Moheda), y con una afici贸n 谩vida de llegar a marzo con opciones para, con seguridad, dar a煤n m谩s el do de pecho, los ingredientes est谩n sobre la mesa. Falta alinear bien la ensalada y, eso s铆, seguir apretando como posesos. No hay otra receta para so帽ar. Y para hacer so帽ar
