Gabriel Jaime

Después de una intensa legislatura, en la que se han vivido episodios de rifirrafes y encontronazos políticos, algunos con bastante acritud, la Corporación Municipal cerró su ciclo con armonía y buenos deseos para todos. Si en ocasiones hubo discordia, el último pleno extraordinario celebrado en la tarde del miércoles trajo la concordia a los diecisiete concejales que han trabajado en pro de conseguir lo mejor para la localidad.  

La sesión en sí fue puramente testimonial porque sólo había un punto en el orden del día. El precepto manda aprobar el acta de la sesión anterior y eso es lo que sus señorías hicieron por unanimidad. Fue un pleno de despedidas para muchos. Unos han ocupado el escaño durante los últimos cuatro años y otros durante varias legislaturas. Por otro lado, algunos de los presentes volverán a tomar posesión de sus “sillones” este sábado en otra nueva andadura política en la que intentarán dar lo mejor de sí en la gestión municipal.

Los portavoces realizaron unos discursos de despedida asegurando que habían trabajado pensando siempre en La Solana y sus ciudadanos, buscando siempre lo más convencional para todos.

El portavoz popular Francisco Nieto aseguró que había aprendido mucho tras haber pasado cuatro legislaturas en el Ayuntamiento. Al respecto afirmó haber recibido las enseñanzas políticas de gente mayor que él, agradeciendo también el apoyo de sus compañeros de partido. Nieto indicó que habían contribuido a la mejora de La Solana con el esfuerzo de todos y avanzó que la próxima legislatura será diferente.

Por su parte, el portavoz de IU Bernardo Peinado también tuvo un recuerdo para los dos primeros concejales de este partido, Juan de Mata Gómez-Pimpollo y Vicente Jiménez. El concejal señaló que habían dado su opinión en todos los puntos debatidos, añadiendo que a veces hubo acuerdos y otras no. Peinado agradeció el trabajo de toda la corporación y deseó suerte a la próxima.

La portavoz socialista Jose Simón fue una de las que se despidieron de sus compañeros después de tres legislaturas. Destacó el esfuerzo de todos y reconoció el orgullo de haber trabajado por el bien de la localidad, dijo.

Finalmente el alcalde Diego García-Abadillo también se despidió de todos los compañeros agradeciendo el trabajo de los concejales por mejorar la localidad. Abadillo aplaudió a los que han aportado un granito de arena para que La Solana esté donde está y tuvo un recuerdo especial para los empleados públicos. Finalmente y al igual que Jose Simón, Abadillo también pidió disculpas por algunas decisiones que posiblemente no han gustado a algunos, lo que siempre fue sin intención de dañar a nadie.

Finalmente todos salieron contentos, posaron para la foto de familia y… pelillos a la mar.