La Custodia volvió a salir a la calle tras dos años por la pandemia

         Paulino Sánchez

La procesión del Corpus volvía a desfilar el domingo por las calles solaneras, después de dos años sin poder hacerlo, contando nuevamente con las alfombras en el asfalto de la calle Convento, mientras que en lo climatológico trajo asimismo un notable descenso en la temperatura, después de una semana de intenso calor.

A las doce del mediodía se celebró en la parroquia de Santa Catalina una misa concelebrada por los párrocos de la localidad Benjamín Rey y Jesús Navarro, que contó con numerosos fieles que llenaban el templo, participando en los cánticos el coro de la parroquia.

La homilía corrió a cargo del párroco de Santa Catalina, Benjamín Rey, que la centró en la importancia de esta celebración, señalando sus orígenes, ofreciendo asimismo diversos datos históricos sobre la devoción a la Eucaristía. Igualmente recordó que la custodia con la Eucaristía volvería nuevamente a desfilar por las calles solaneras, después de dos años sin haber salido en procesión debido a la situación sanitaria.

Los niños y niñas de comunión volvieron a ser protagonistas en la procesión del Cospus Christi

Posteriormente, daba comienzo el desfile procesional, desde la parroquia de Santa Catalina a la de San Juan Bautista de la Concepción, que abría la cruz alzada, continuando con las niñas y niños de primera comunión, 117 en total. De ellos 54 la han tomado en la parroquia de Santa Catalina,45 en la parroquia de San Juan Bautista y otros 18 en la Iglesia de Santa María, siendo numerosos los que portaban canastillas con pétalos de flores que iban dejando en los altares donde era depositada la Custodia.

Los directivos de las cofradías y hermandades de la localidad desfilaron seguidamente, continuando las asociaciones eucarísticas Marías de los Sagrarios, Adoración Nocturna, con sus banderas. La Sacramental era encabezada por el estandarte, llevando los componentes de la misma los hachones de cera, mientras que otros el palio, bajo el cual desfiló la Custodia portada por los párrocos.

La representación municipal la ostentaba el alcalde Eulalio Díaz-Cano, al que acompañaron concejales de los grupos socialista y de ciudadanos, cerrando la Banda Municipal de Música, que bajo la dirección de Ángel Sancho interpretó diversas marchas procesionales en el itinerario.

En las calles del recorrido, Monjas, Carrera y Convento se habían levantado diversos altares, colocándose en los mismos la Custodia, para realizarse unas oraciones y cánticos. Asimismo numerosos balcones del recorrido se encontraban engalanados.

Los vecinos de la calle Convento engalanaron la calle con distintos diseños de alfombras de sal

Cuando la procesión llegó a la altura del Convento de las Monjas Dominicas de clausura, junto al altar que habitualmente se levanta frene a su fachada, lo acompañaba un estandarte con motivos sacramentales, bendiciéndose con la Custodia a las monjas que contemplaban la procesión desde las celosías.

        Al llegar la procesión a la esquina de la calle Carrera con la de Convento, los participantes dejaron el centro de la calzada libre, pasando a los laterales, para no pisar las alfombras que los vecinos de la calle habían preparado a lo largo de la noche anterior, para que pudiera ser pisada en primer lugar por el sacerdote portador de la Custodia.

Una novedad en las alfombras de este año ha sido la colocación de una en el pórtico de salida de la parroquia de Santa Catalina, mientras que a lo largo de la calle Convento se adornaron las alfombras con distintos detalles, entre ellos el escudo de La Solana, además de arcos y a la entrada de la parroquia de San Juan Bautista de la Concepción otra alfombra con la cruz trinitaria.

        El interior del templo estaba engalanado con diversas colgaduras, entre ellas las del altar mayor, con el escudo de la parroquia en el que se combina la cruz de Santiago con la trinitaria, recordando los orígenes de la localidad con la llegada de los frailes trinitarios.

        Con la bendición con la Custodia y la posterior reserva concluyeron los cultos, que nuevamente han podido celebrarse tanto en los templos como en las calles de la localidad como es tradicional desde hace siglos.