Un momento de la eucaristía con la participación del presidente, a la izquierda                Foto: GACETA

-Paulino Sánchez

La nota destacada de la celebración de la patrona de la vista, Santa Lucía, ha sido la vuelta a la ermita de Santa Quiteria, después de haberse cambiado el año anterior a la parroquia de San Juan Bautista de la Concepción, en los cultos que son organizados por la Hermandad del Santo Sepulcro y Soledad de la Virgen a cuyo cargo está la ermita.

A lo largo de todo el día fueron numerosos los devotos que se acercaron hasta la ermita de Santa Quiteria, para rezar ante la imagen de Santa Lucía, siendo asimismo muchos los que depositaron flores a los pies de la imagen.

   Los cultos concluyeron en la ermita, con el rezo del rosario primero y la celebración de la misa seguidamente. La Eucaristía fue oficiada por el párroco de San Juan Bautista de la Concepción, Jesús Navarro, contando en la parte musical con la intervención del coro de la misma parroquia.

 

El coro de la parroquia de San Juan Bautista también participó en la festividad                 Foto: GACETA

En su homilía Jesús Navarro recordó algunos aspectos de la vida de Santa Lucía, que sufrió las persecuciones hacía los cristianos del Imperio Romano en el siglo IV, en la época del emperador Diocleciano.

   Asimismo, recordó las virtudes de Lucía quien decidía ofrecer su virginidad a Dios, reuniéndose con otras mujeres que asimismo lo hacían, añadiendo que se dedicaban a las ayudas a las personas necesitadas como las viudas y los huérfanos.

Los fieles volvieron a llenar el interior de Santa Quiteria, recibiendo al final estampas con la imagen de la patrona de la vista, contándose en la celebración con la asistencia de concejales del equipo de gobierno del Ayuntamiento, encabezados por el primer teniente de alcalde Luis Romero de Ávila.

 

Imagen de los asistentes que llenaron el pequeño templo                        Foto: GACETA

El presidente de la Hermandad del Santo Sepulcro, José María Romero de Ávila Román, agradecía la asistencia de numerosas personas a la ermita durante todo el día, así como a los cultos de la noche.

Sobre la preparación de la próxima Semana Santa, señalaba que todo estaba en el aire y, aunque ellos siempre comienzan a preparar una vez que pase la Navidad, añadía que estaban expectantes porque en cualquier momento puede haber algún cambio en la situación sanitaria y con mucha ilusión, aunque todo depende de la situación sanitaria.