Gabriel Jaime

La expedición de alumnos y profesores del proyecto Comenius visitó dos bodegas de la localidad para descubrir cómo se elaboran los vinos manchegos. La jornada arrancó en Bodegas Romero de Ávila Salcedo y concluyó en la Cooperativa Santa Catalina, degustando los caldos más representativos de cada entidad.

Los alumnos europeos del intercambio con el IES Clara Campoamor conocieron los entresijos de las bodegas locales a través de visitas guiadas, aprendiendo las características que hacen genuinos a los caldos manchegos. La Cooperativa Santa Catalina dio a probar las variedades autóctonas de blanco airén y de tinto tempranillo, promocionando así los productos originarios de la tierra.

El contingente formado por alumnos procedentes de Alemania, Polonia, Lituania, Croacia, Grecia, Portugal, Italia y Turquía, estuvieron acompañados por los máximos responsables de cada bodega. En el caso de la Cooperativa Santa Catalina, estuvieron al frente de la visita el presidente Gregorio Martín-Zarco y la gerente Beatriz Muñoz, además del representante de la DO La Mancha Ángel Ortega.

La gerente señaló que el objetivo era mostrar cómo se hace el vino en una bodega manchega, conocer las partes de la misma y que vean nuestra manera de elaborar el vino. En este sentido, Beatriz Muñoz, argumentó que los alumnos querían conocer cómo ha evolucionado la forma de hacer el vino, comparándolo también con el de otros países.

Después de ver las instalaciones y de explicar las partes más importantes, se pasó a la cata de los caldos más característicos de la Cooperativa. Todo un experto como Ángel Ortega, de la DO La Mancha, fue el encargado de llevar a cabo la cata básica, asegurando que los alumnos se irían contentos tras probar los caldos jóvenes tan reconocidos en todos los niveles. Ortega indicó que los chavales hablarán bien de nuestros vinos en sus países de origen, indicando que de esta manera también se promocionan nuestros caldos.