Un momento del pleno extraordinario                                                                                                                                                                                       Foto: GACETA

          Aurelio Maroto

            Un de los grandes objetivos de la legislatura era desbloquear el Parque Empresarial, fuente de penalidades para el Ayuntamiento en los últimos años. Pues bien, el Pleno escenificó ayer ese momento, que podría tildarse como histórico. La Corporación aprobó, por unanimidad, liquidar el convenio con GICAMAN (Gestión de Infraestructuras de Castilla-La Mancha) para que el polígono pase definitivamente a manos municipales.

            Aunque el debate del único punto de esta sesión extraordinaria y monográfica se prolongó por espacio de 45 minutos, los tres grupos políticos se sentaron con su voto decidido, que fue favorable. El alcalde, que en ningún momento ocultó su satisfacción, comenzó con un alegato de defensa a este momento. “Hoy vamos a decidir una de las cuestiones más trascendentes para el futuro de La Solana” –dijo-, e instó a sus colegas de Corporación a sumarse a esta oportunidad. “Lo que acordemos beneficia al interés general de nuestro pueblo”.

            Pero no hizo falta convencer a nadie. Tanto Izquierda Unida como el Partido Popular estaban convencidos y eran conscientes de la importancia del asunto. Con matices, eso sí.

            El portavoz de IU, Bernardo Peinado, admitió que el convenio beneficia a La Solana. “Es el acuerdo menos malo; por lo menos no perdemos”. No tuvo problemas en reconocer que su grupo se equivocó cuando votó la urbanización total del polígono en 2006, y no por fases, como se hará ahora, ni tampoco en llegar a acuerdos “con el partido que sea si es por el bien del pueblo”. Pero advirtió que no resuelve el problema principal: el desempleo, ni siquiera la urbanización definitiva. “Hoy abrimos una puerta pero después hay un pasillo para ver cómo financiar esa obra”. Por eso insistió en abordar “la otra pata del banco”, o sea, pedir a la Junta financiación para terminar el área industrial, cosa que su grupo ya ha hecho varias veces desde el año 2013.

            Ana Belén Reinoso, portavoz del PP, dijo que el tiempo ha dado la razón a su grupo, el único que pidió urbanizar por fases desde el primer día. “La pinza PSOE-IU decidió hacerlo de una vez pese a nuestra insistencia; nos alegra su campo de opinión” –declaró-. Justificó el voto favorable porque “pensamos en el bien de los solaneros”, pero coincidió en que queda un largo camino por recorrer. Por otra parte, reprochó al alcalde haberse enterado por la prensa del acuerdo del 18 de enero y pidió, en adelante, “avanzar juntos”. También aprovechó para insistir en la revisión integral de cuentas aprobada. “Sólo falta la voluntad del alcalde”.

            Luis Díaz-Cacho expresó su gratitud sincera a la oposición por apoyar este importante convenio. “Nos han perdonado dinero” –manifestó- y reconoció que ahora hace falta ingenio para terminar de levantar el parque empresarial. “Iremos dando pasitos pequeños, conjugando la venta de parcelas con la urbanización”. Está de acuerdo en que el polígono no resolverá el problema del paro, pero sí puede ayudar. “El empleo lo crea la empresa y hay empresarios interesados en instalarse”.

            Cerró el debate agradeciendo el tono del debate y afirmando que “la razón la tiene el futuro de La Solana”. Tal vez llevado por su visible alegría, terminó deseando feliz Navidad. “Semana Santa, quiero decir” –rectificó entre la sana hilaridad de la sala-.