La cooperativa prepara mejoras importantes en sus instalaciones              Foto: GACETA

    Aurelio Maroto

    La Cooperativa Santa Catalina de La Solana prepara un ambicioso plan de modernización y mejoras que deben tener traducción en los próximos años, a ser posible durante la legislatura que acaba de comenzar. Pedro José Martín-Zarco ha sido reelegido en última asamblea para liderar ese proceso. Será su tercer mandato como presidente, “y probablemente el último”, según ha reconocido ante la prensa. Energía y ganas no le faltan, y confía en que haya recursos suficientes para implementar los proyectos en mente, entre ellos trasladar la cooperativa al parque empresarial, aunque esto último solo es una idea y requerirá tiempo de maduración. Sí está más concretado ampliar el almacenaje de uva, actualizar la almazara y una profunda remodelación del edificio donde se asientan las oficinas y la tienda. Se prevé invertir más de 3 millones de euros en conjunto.

Pedro José Martín-Zarco afronta su tercer mandato            Foto: GACETA

    De momento, la entidad goza de salud económica. “Ha sido un año bueno, se han dado unas liquidaciones decentes y ha quedado un beneficio de unos 300.000 euros, así que estamos contentos”, ha declarado Martín-Zarco, que tiene claro hacia dónde debe caminar la empresa. “La cooperativa no puede parar, tiene que tener proyectos y seguir avanzando”. “La creciente confianza de los socios nos anima a abordarlos”. En la asamblea explicó que hay un VINATI para la bodega y un FOCAL para la almazara. En cuanto al VINATI (Inversiones en instalaciones de transformación y en infraestructuras vinícolas), es necesario ampliar la bodega. “Cada vez entra más uva y hay que acortar esperas, descargas y almacén para otros 7 millones”. Algo parecido sucede con la sección de aceituna, teniendo en cuenta el aumento de olivares. “Hay que remodelar la almazara con equipos más eficientes y cubrir el patio”. También se instalarán placas solares. A esas remodelaciones se añaden obras en el edificio administrativo. “Vamos a hacer una tienda más grande, separarla del repuesto, una nueva sala de juntas, nuevos aseos y un pequeño comedor para los empleados”. 

    Pedro José Martín-Zarco lleva 8 años como presidente, más 12 en el consejo rector. No olvida el año de que hubo pérdidas, pero la situación ha cambiado y la maquinaria humana funciona perfectamente entre trabajadores y consejo, a lo que se une su propia situación familiar. “Mis hijos ya se ocupan de mi explotación y yo puedo dedicarme a la cooperativa, cosa que no pasaba cuando empecé”. Pero dio a entender que serán sus últimos cuatro años. “Todo empieza y todo tiene un final”, subrayó.