Kiko Pancho durante su charla en la caseta municipal                         Foto: GACETA

     Aurelio Maroto

    La caseta municipal acogió este domingo una jornada muy especial. Se celebraron varias exhibiciones de ciclismo en silla de ruedas y charlas alusivas. La Fundación de Ciclismo Adaptado de Castilla-La Mancha organizó el evento en colaboración con el Ayuntamiento de La Solana. Durante las demostraciones, quedó claro que una discapacidad física no es obstáculo para practicar muchos deportes, entre ellos el ciclismo. 

   Un buen ejemplo es Kiko Segadura, popularmente conocido como Kiko Pancho, que desde que quedó postrado en silla de ruedas tras un desgraciado accidente de moto, no ha parado de superarse y ahora es un atleta de alta competición en handbike. De hecho, es bastante habitual verlo entrenar por las calles de La Solana y alrededores. Sin embargo, el objetivo de Kiko va más allá sentirse realizado a lomos de su handbike, ya que no para de ofrecer charlas y acudir a centros educativos para acercar su propia experiencia y dejar claro que hay vida después de una lesión medular. Y mucha. Naturalmente, también muestra el camino para minimizar los riesgos en un trabajo de prevención. 

 

Kiko, Toni, Antonio y Rafa durante la exhibición de ciclismo adaptado                  Foto: GACETA

   Kiko Pancho estuvo muy bien acompañado, entre otros por lesionados que hasta hace poco han permanecido ingresados en el hospital de Parapléjicos de Toledo, una especie de templo para este tipo de lesiones. Entre ellos, vimos a los solaneros Rafa Luna y Toni de la Torre, que han logrado resetear su mente para iniciar un nuevo camino en la vida, que sigue estando lleno de proyectos, retos y objetivos.