El pívot francés Phillippe Correia entra a canasta durante el partido contra el Fuenlabrada                                 Foto: GACETA

     Aurelio Maroto

    El Doña Ramoncita-CB La Solana cumplió los pronósticos y derrotó al bisoño filial del CB Fuenlabrada con enorme autoridad: 92-61. No siempre es así, pero esta vez el resultado final responde a lo visto sobre la pista del ‘Serrano’. Los locales fueron muy superiores en todas las facetas del juego, especialmente en el dominio del juego interior, y anduvieron finos cuando hizo falta desde el perímetro. El mejor ejemplo es que el porcentaje de acierto desde la línea de tres rozó el cincuenta por ciento.

    El triunfo se fraguó desde el arranque. Un parcial de 15-3 marcó territorio y los madrileños nunca volvieron a acercarse a las barbas del anfitrión. Y para barbas, la de Cuco. El pívot infanteño, sin apenas protagonismo hasta ahora, se soltó con un señor partido. De hecho, se fue hasta 17 puntos para ser el máximo artillero del partido, con 7 de 12 en tiros de campo, de los cuales 3 triples, y una versatilidad de movimientos que tiene mucho que ver, imaginamos, con su cura de adelgazamiento.“Cuco nos viene muy bien porque abre el campo y tiene muy buena mano”, reconocía Mica Tolosa al término del partido.

    La estadística en un partido tan cómodo pierde protagonismo. De todas formas, volvió a sobresalir el control del juego que ejerce Álex Talamino, que sacó a pasear su batuta en los momentos precisos, sobre todo en el tercer cuarto cuando el parvulario visitante hizo un intento de rebelión imposible. El base catalán se fue a 16 puntos sin necesidad de jugar prácticamente todo el partido como es costumbre, y en el sofoco de ese atisbo de reacción visitante tuvo la ayuda de Mario. Buenos minutos también de Darío Dondarza, adalid de unos primeros minutos fantásticos, y buena igualmente la aportación de Carlos Castaño con disparos certeros desde 6,75. El solanero se fue a 11 puntos y 22 de valoración.

    En cualquier caso, fue un partido para seguir rodando y engrasando la maquinaria. Ideal para que el cuerpo técnico rote y contente a todos. “Tras la derrota de Majadahonda hablamos con los chicos y les recordamos que la temporada es larga, que confiamos en ellos y que todos tendrán su momento”. “Hoy lo han demostrado porque el que ha salido ha estado enchufado”, subrayaba Mica Tolosa.

     Con dos victorias en el zurrón en estos primeros cuatro partidos, y pleno de aciertos en casa, el equipo viajará tranquilo al derbi regional en Tobarra. Tranquilo pero ilusionado, claro.