Ainhoa -dcha- en una de las pruebas disputadas en León

          Aurelio Maroto

Si hay una fábrica capaz de producir con una asiduidad realmente sorprendente, esa es la Escuela de Atletismo de La Solana. Esta última temporada hemos tenido ejemplos notables, con resultados muy buenos en las distintas citas provinciales y regionales a nivel escolar. El último es muy llamativo, ya que Ainhoa Gómez-Pimpollo ha debutado en un Campeonato de España en categoría sub-14.

Con solo 13 años, Ainhoa se ganó el billete tras un año brillante en las pruebas más domésticas. Fue subcampeona regional en 80 metros vallas, bronce en 150 metros lisos y relevo 5x80, y también logró un cuarto puesto en los 80 metros lisos.

En este debut en un nacional, celebrado en León, la joven solanera terminó en la posición vigésimo séptima. Participó en el triatlón A, que se componía de 80 metros lisos, 80 metros vallas y lanzamiento de peso. En vallas hizo marca personal con 13.74 segundos, la decimosexta de España. En peso se fue hasta 6.18 metros, a solo 3 centímetros de su récord personal. El viento en contra fue un obstáculo en los 80 metros vallas.

La joven promesa con su entrenador, Pedro Juli Moreno

En declaraciones a Radio Horizonte, su entrenador, Pedro Juli Moreno, no ha ocultado su satisfacción por el éxito de este nuevo valor de la prolífica cantera solanera. Sin embargo, es consciente de que todavía es muy joven y que este tipo de citas le deben servir como acicate para seguir entrenando y creciendo en este deporte. “Lo más importante en esta edad es la mera asistencia a un campeonato de España y que la niña genere valores y hábitos del deporte”. “Es el mejor aliciente para un atleta joven”.

A la experiencia de la propia competición con las mejores de su edad se une la convivencia. “Vivió un gran fin de semana con su familia y ha hecho amistades, sobre todo con su principal rival”. En lo puramente deportivo, Pedro Juli destaca su progresión en vallas y la mejora de la técnica, tan importante para una prueba de esta naturaleza. Pero insiste, hay que tener mucha paciencia: “Veremos en qué se convierte en los próximos años lo que no deja de ser proyecto de atleta”.