Andrea Rincón cae ante dos jugadoras cordobesas durante el partido jugado en La Moheda                         Foto: GACETA

               Aurelio Maroto

            El Quesos La Casota-FF La Solana sucumbió ante un potente Córdoba CF en su primer amistoso con público en La Moheda (1-3). Una prueba muy exigente que, sin embargo, sirvió para aprender y sacar algunas conclusiones. La principal, que Reto Iberdrola es otro mundo, como ya se vio el martes contra el Fundación Albacete. Más ritmo, más velocidad de juego, más calidad individual, más despliegue físico… Las amarillas están haciendo un curso acelerado sobre el césped, al que se unen las 5 nuevas incorporaciones, que se esfuerzan por comprender su rol en una plantilla que mezcla ilusión y bisoñez a partes iguales.

“Nos está penalizando la inexperiencia en la categoría”, reconocía David Peinado al término del partido. “Nos hemos enfrentado a equipos como Albacete y Córdoba, que tienen jugadoras muy experimentadas que marcan diferencias”. Pero, a continuación, se mostraba convencido de la capacidad de las suyas. “Creo que podemos competir con ellos”.

Era una tarde para disfrutar. Por fin volvía el público y la respuesta fue realmente buena. La afición tiene ganas de fútbol femenino. Lástima que la puesta en escena fuera tan esquiva. Las califas acertaron nada más comenzar el partido haciendo el 0-1. Demasiado lastre antes siquiera de romper a sudar. “Es una prioridad trabajar más el aspecto defensivo y evitar que nos hagan goles con facilidad, sobre todo contra equipos como el Córdoba, que tiene jugadoras que han jugado en Primera y en cualquier despiste de penalizan”, admitía Peinado.

 

La Moheda volvió a contar con público para ver al FF La Solana                                                             Foto: GACETA

Con todo, el equipo trató de recomponerse, intentando no dejarse desbordar por un rival que manejaba mejor la ronda de pases y rompía con peligro por banda. A la media hora, un agujero por el centro provocó el 0-2. Pero a base de empuje y un gran nivel de sacrificio para achicar espacios, las locales ya se habían asomado a la portería andaluza, defendida por Patricia Curbelo (que llegó a anunciarse como fichaje amarillo). Gran trabajo en el medio de jugadoras como Raquel o Andrea Rincón, y buenas prestaciones de Irina Viñals por el costado zurdo. Suya fue una gran jugada que acabó en las botas de Gabrielle Nagaska para, en una rápida maniobra en el punto de penalti, hacer el 1-2.

La segunda parte tuvo un dominio alterno, ya con muchas jugadoras de refresco. El Córdoba aprovecharía otro despiste defensivo para hacer el tercero y definitivo a diez minutos del final. “Tenemos que ir mejorando los conceptos tácticos, la salida de balón y más manejo para evitar que el rival nos haga daño”, declaraba el míster, consciente de que hay que insistir en el ensayo-error como método heurístico “hasta que tengamos esos mimbres para competir tranquilos en esta categoría”.

A la pregunta de si Albacete y Córdoba son un termómetro de lo que La Solana se va a encontrar en liga, el míster reconocía que han sido dos rivales formidables, con mucho nivel en Reto. “El Córdoba ha hecho diez o doce fichajes importantes y está hecho para meterse en el play-off y el Albacete sólo tiene como objetivo volver a Primera”. Cree que habrá otros equipos un punto por debajo y es ahí donde su equipo tiene que hacerse fuerte.

Al final, no dejan de ser bolos de pretemporada que tienen que servir como máster de aprendizaje. Aún quedan dos semanas para seguir ajustando conceptos antes del debut en Granada, donde ya se espera contar con las lesionadas Marta, Natasha y Nerea Marín. Por cierto, la semana siguiente volverá el Córdoba a La Moheda, ya con puntos en juego. Quizás sea otra historia.