Antonio García-Catalán, en el centro, se rodeó de amigos en la premier de su libro          Foto: GACETA

         Aurelio Maroto

         No le gusta el fútbol. Ni siquiera cuando era niño destacaba por sus fundamentos con el balón en los pies. Pero, si se lo propone, su pluma es capaz de evocar al mismísimo Messi. Y se lo propuso. Un día conoció de un concurso que pedía relatos para un libro sobre fútbol, suficiente para encender su bombilla. Así fue como Antonio García-Catalán Barchino comenzó a enredar en su mente para pergeñar una historieta protagonizada por el fútbol, y también por su infancia.

         Una vez terminado, envió su relato a la editorial que organizaba el concurso. Una más entre doscientos y pico. Poco tiempo después fue avisado de que había sido seleccionado entre los veinte que se incluirían en el libro titulado “Cuéntame un gol. Cuentos de fútbol”, un mosaico de relatos variados que describen situaciones en el mundo del fútbol desde todos los puntos de vista: los niños, los árbitros, los entrenadores, y hasta los titulares y suplentes. “El libro está muy bien porque hay historias desde muchos puntos de vista, es muy variado” –declaró-.

         En la presentación, celebrada en el coqueto salón de actos de la Biblioteca Municipal, participó el alcalde, Luis Díaz-Cacho, coetáneo del autor, con el que compartió callejeo de niño. “No era un habitual del balón sino un magnífico contador de historias”. “Ese gol es el reflejo de la sociedad solanera del momento”. Juan Pedro Arque presentó el acto y elogió al autor, “es un narrador de fina ironía y gran imaginación”. También intervino el entrenador del CF La Solana, Juan de Lara, que destacó la mezcla que el autor entre lo solanero y el fútbol, “el fútbol es mucho más de lo que parece, ya que trasmite emociones y sentimientos”. Isabel del Rey, presidenta de Pan de Trigo, recordó cuando Antonio hacía creatividad literaria en un taller de teatro y escribió “Pollo con arroz”. Era el año 1992 y demuestra su precocidad como narrador.

El cuento de Antonio García-Catalán tiene algo de autobiográfico, ya que se adentra en un partidillo de fútbol callejero que jugó en su infancia. Uno entre muchos, pero con un recuerdo especial para el autor. Ese día se fue a jugar a la barriada conocida como el Barranco Lobo, “había una leyenda de que los niños del Barranco eran un poco traviesos…”. Marcó un gol, de ahí el título “Mi primer gol” ¿Qué pasó aquella tarde? Mejor leerlo.

 

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