Santiago López en su encuentro con los medios                 Foto: GACETA

        Aurelio Maroto

El concejal de Promoción Económica, Santiago López, avanza la próxima celebración de una feria agroalimentaria, que se celebrará en junio y será regulada por una nueva ordenanza. El reglamento fue aprobado por unanimidad en el pleno del 3 de abril y cree que la unanimidad en su aprobación revela el buen trabajo realizado en su elaboración. “Esta ordenanza recogerá la promoción de nuestro pueblo”, dijo, y un buen ejemplo será esta primera feria para promocionar los productos de La Solana. También regulará otros eventos de naturaleza parecida.

      Esta primera feria agroalimentaria cuenta ya con un presupuesto inicial de 30.000 euros, sin contar aún lo que pueda aportar la Diputación Provincial. López se mostró convencido de que la cita tendrá un importante impacto en La Solana, no solo a nivel de imagen sino también económico. Estimó que habrá un retorno aproximado de 55.000 euros gracias a la ocupación hotelera y el gasto añadido en hostelería y comercio. “Es una oportunidad que no podemos dejar escapar porque nuestro pueblo y sus empresas lo merecen”.

Remodelación patio del Don Diego

Aprovechó la rueda de prensa para contestar a las críticas del PSOE por la remodelación del patio del Don Diego sin autorización de Patrimonio. “Tenemos un informe que dice que dicha actuación se califica como meros trabajos de mantenimiento, que no afectan a la configuración e integridad arquitectónica del edificio”, afirmó el edil. Conviene recordar que se han retirado los vinilos colocados en 2011 y se han repintado las paredes de blanco.

López se preguntó qué actuaciones ha hecho el Ayuntamiento desde que el Palacio Don Diego fue catalogado como Bien de Interés Cultural (BIC) para evitar su deterioro. “Distinta vara de medir tiene el exalcalde socialista –en referencia a Eulalio Díaz-Cano- respecto a la responsabilidad de mantener el edificio como patrimonio municipal; me encontré en el museo [de la Rosa del Azafrán] un verdadero almacén, o una oficina de turismo que carecía de todo, sin callejeros ni información sobre La Solana, solo una vitrina arrinconada cogiendo polvo”. Finalizó expresando su compromiso con el cuidado del rico patrimonio local: “Está en nuestra mano conservarlo en buenas condiciones para uso y disfrute de todos”.