Agricultores solaneros durante la última protesta en Toledo

         Aurelio Maroto

        El campo no frena en su afán reivindicativo. Este miércoles volvieron a salir los agricultores de Castilla-La Mancha para protestar frente a la Consejería de Agricultura, en Toledo. La tractorada reunió a un buen número de profesionales -entre ellos un autobús completo de La Solana- que siguen erre que erre con su presión sobre las administraciones públicas, en este caso el gobierno regional. Una vez más, quedó clara la división existente porque había convocado Unión de Uniones, que lleva su propia hoja de ruta en contraposición con las organizaciones tradicionales, ASAJA, COAG y UPA, que este viernes también se concentran en la capital imperial.

       En declaraciones a Radio Horizonte-La Solana, el presidente del Centro Independiente de Agricultores y Ganaderos (CIAG), Casto García-Cervigón, ha vuelto a cargar contra la actitud de las autoridades, en particular contra el gobierno autonómico. “Europa pone unas normas y el ministerio las firma, pero quien tiene que ponerlas negro sobre blanco es Castilla-La Mancha y decir hasta dónde llegamos con el cuaderno digital o con los ecoregímenes”, ha señalado. Cree que la acción de este miércoles "es un suma y sigue”, ya que el gran punto de inflexión tuvo lugar en la histórica tractorada de Madrid.

      Una de las cuestiones que más reclama Unión de Uniones es la celebración de elecciones en el campo. Casto García-Cervigón es muy beligerante con este tema. Insiste en que no es de recibo ver siempre las mismas caras. “Son como los malos maridos, no vale decir que van a cambiar”. Considera inaceptable que no haya habido elecciones desde mayo de 1978, y está convencido de que tal inmovilismo responde a una cuestión económica: “La madre del cordero está en las subvenciones y se agarran a ellas como un clavo”. “La Junta los tiene bien pagados para que haya paz social”, afirma.

       Confía en que esta protesta, y las que vendrán, convenzan a los líderes políticos regionales de que Unión de Uniones es un interlocutor válido, igual que las organizaciones agrarias mayoritarias. “En Toledo no estábamos cuatro liebres, como nos dijeron, sino agricultores y agricultoras”.