

Serrano, junto a Raúl Baltar y el ex-saltador, Jesús Oliván. A la derecha, con el alcalde, Luis D-Cacho Fotos: GACETA
Aurelio Maroto
Antonio Serrano ha dado un nuevo paso en su brillante carrera con la creación de una fundación que lleva su propio nombre. Una iniciativa poco común para impulsar el atletismo de base, cuyo objetivo apunta directamente al corazón del problema: la falta de financiación y oportunidades para los nuevos talentos. El atleta solanero, arropado por sus discípulos, algunos de ellos medallistas, además de por un nutrido grupo de amigos y paisanos, incluido el alcalde de La Solana, Luis Díaz-Cacho, vivió con intensidad la presentación oficial de un proyecto ambicioso, y también realista. “Es uno de los días más importantes de mi vida” –declaró a la Radio Horizonte-La Solana.
No es para menos. La apuesta del banquero gallego Raúl Baltar, principal mecenas de la criatura, constituye un salto cualitativo y cuantitativo en la promoción del atletismo de cantera. “Un día, mientras rodábamos, le propuse a Antonio hacer algo y me lanzó la idea de la fundación”. Atleta popular, Baltar es un entusiasta de este deporte, vio genial la idea, y propuso a Serrano darle su propio nombre, dado el prestigio de quien calificó como “una leyenda del atletismo español”, actualmente entrenador de reconocido pedigrí. Dicho y hecho. Aquella tarde de trote fue en octubre de 2014, y apenas cuatro meses después ya hay una realidad tangible.
Durante la presentación oficial, celebrada en el Centro de Innovación BBVA, en Madrid, quedó claro que la Fundación “Antonio Serrano” nace como una herramienta concebida por y para los deportistas de abajo, los más jóvenes, aquellos que apuntan posibilidades y no siempre encuentran cómo formarse adecuadamente para explotar sus posibilidades. Es cuestión de encontrarles una correcta formación, sí, pero también una financiación suficiente. Es aquí donde pondrán el acento. “Nuestro trabajo ahora es buscar patrocinadores que aporten dinero para nuestros fines”. El desarrollo de estrategias de esponsorización, tanto para la base como para la élite, es un reto al que se une la organización de actividades y eventos deportivos.
Antonio Serrano, que durante la presentación expresó su condición de solanero, como también se pudo comprobar en un vídeo retrospectivo con imágenes de su infancia y de sus éxitos como atleta, está viviendo con enorme emoción este momento. “Es una etapa más en mi vida y tendré que sacar tiempo de donde pueda, pero todo sea por la promoción del atletismo”.
A la cita no faltaron algunos nombres ilustres del atletismo español de los últimos años, todos tutelados en su día por él, caso de Juan Carlos de la Ossa, Chema Martínez, Alessandra Aguilar o Juan Carlos Higuero. Y entre ellos, también estaba Ignacio Díaz-Cacho “Rechi”. El solanero, discípulo aventajado de Serrano y varias veces campeón de España en categorías inferiores, el domingo pasado fue cuarto en el Nacional Promesa de 800 metros. Y este próximo domingo, en Antequera, correrá el Campeonato de España Absoluto de la distancia. A sus 21 años, parece definitivamente recuperado de sus problemas en la tibia y su entrenador es su principal valedor. “Es un chaval muy disciplinado, cumple todo lo que le digo y espero mucho de él”. De solanero a solanero.