
El equipo solanero mereció mejor suerte en la final Foto:GACETA
Paulino Sánchez
Con lágrimas en los ojos acabaron los jugadores del Club Baloncesto La Solana en la final de la Copa Federación. Y es que, aparte del buen equipo de Alcázar que tuvo enfrente, las decisiones arbitrajes influyeron en el resultado final tras una remontada épica de los amarillos que contaron con el apoyo de una incondicional afición.

Pablo recogió el título de subcampeón de manos del alcalde Foto: GACETA
El sábado eliminaron, en un encuentro muy disputado al equipo de Miguel Esteban y en la final se enfrentaron al Grupo 76 Alkasar, un buen equipo, pero que al final se impuso con la ayuda arbitral al equipo solanero.