Alumnos y profesoras en Almagro, donde recibieron el premio                                                          Foto: GACETA

         Aurelio Maroto

         El CEIP Sagrado Corazón se ha apuntado un importante éxito. Ha logrado ganar el primer premio del proyecto Kaleidos, un certamen de rango autonómico en el que han participado medio centenar de centros educativos de toda Castilla-La Mancha. Había cinco modalidades y el Sagrado Corazón mereció el reconocimiento del jurado con “El nombre de mi centro”, superando en el podio a un colegio de Toledo y otro de Villalba de la Sierra (Cuenca).

         Los alumnos de 5º y 6º de Primaria han trabajado durante los últimos meses en una serie de actividades marcadas por la variedad y la originalidad. Bajo la coordinación de tres maestras, los colegiales han tenido la oportunidad de involucrarse al máximo en este proyecto, basado en investigar sobre la génesis y el devenir del veterano colegio a lo largo del tiempo.

         María Dolores Prieto, especialista de inglés, no ocultó un sano orgullo, “es muy satisfactorio para todos recibir este premio”. Comenzaron escudriñando en los orígenes del convento de Trinitarios, la construcción de las primeras escuelas y cambio de nombre a Sagrado Corazón. Pero también se ha buceado en la historia de La Solana, los oficios perdidos o casi perdidos, implicando a los niños en la recopilación de libros, juguetes antiguos y cualquier información alusiva. La docente destacó el alto compromiso de los alumnos, “han demostrado motivación y han participado mucho recopilando información”.

Consuelo Navarro, tutora de 5º, destacó la jornada de convivencia con los mayores. “Ese día lo pasamos muy bien con los abuelos, los niños se relacionaron con ellos y aprendieron muchas cosas”. En ese encuentro intergeneracional hubo exhibición de juegos populares de antaño y gastronomía tradicional.

El premio no sólo es un espaldarazo al trabajo realizado, sino también un respiro para la intendencia del colegio. “Nos corresponden una dotación en material escolar que nos vendrá muy bien”. También incluye una estancia en un albergue, aún sin confirmar cuál. La maestra de religión, Maribel Delgado, cree que el jurado ha sabido valorar “el esfuerzo de los niños y la belleza y originalidad del proyecto”. Por cierto, explicó cómo recibieron la buena nueva, “llegó Jesús (el director) a clase diciendo que tenía una ‘mala noticia’; cuando nos dijo la verdad los niños se pusieron locos de contentos”.