
Los amarillos demostraron orgullo, pero no pudieron con La Gineta Foto: GACETA
Aurelio Maroto
Hay rivales contra los que no es suficiente hacer un buen partido. Le pasó al CF La Solana en La Gineta, donde jugó bien, tuvo sus opciones y quizás mereció más, pero acabó mordiendo el polvo. Sucede cuando no aprovechas tus ocasiones y enfrente hay un equipo construido para ascender. En efecto, los amarillos quisieron sacudirse la caraja de los dos últimos partidos en casa y casi lo consiguieron. Pero faltó el casi. He ahí la gran diferencia en este tipo de encuentros.
El principio del fin llegó pronto, por que a los 8 minutos La Solana perdía 2-0. Demasiada losa para un equipo que hasta ahora se había mostrado segurísimo en defensa. Toni Huertas no daba crédito a tal profanación de su portería. Aunque Capelo acortó distancias poco después, los de Juan de Lara siempre jugaron a remolque, a contracorriente, remando con mucho oleaje. David Sevilla tuvo en sus botas el empate, pero no acertó. Y, claro, pasa lo que pasa. El ginetero Herra hizo el 3-1 y prácticamente liquidó la contienda a veinticinco minutos del final. Los visitantes lo siguieron intentando, pero el partido estaba perdido. Se perdió en 8 fatídicos minutos.
Quedan las buenas sensaciones. No es poco si tenemos en cuenta que aún queda un mundo por delante. Todos los equipos atraviesan su particular bache en una temporada tan larga. Quién sabe si La Solana ya ha pasado el suyo. Lo comprobaremos el próximo domingo en La Moheda con la visita del Carrión.