
La Cruz presidió el escenario en la tercera edición del festival Foto: GACETA
Aurelio Maroto
La caseta municipal albergó el III Festival Infantil de Mayos Manchegos, que unió en el escenario al grupo “Mancha Verde”, de Argamasilla de Alba, con los anfitriones de la Agrupación Folklórica “Rosa del Azafrán”. Finalmente, el mal tiempo impidió actuar con antelación en la parroquia de Santa Catalina y hacer un pasacalles hasta la caseta, pero el festival acabó celebrándose tal y como estaba previsto.
Ambos grupos exhibieron su talento en el escenario, y las grandes similitudes que existen entre el folklore tradicional de unos y otros, tal y como reconocía el presidente de “Mancha Verde”, Pablo Martín “los pasos de los bailes de La Solana y Argamasilla son muy parecidos, y a la vez muy distintos de otras zonas como Tomelloso o Manzanares”. El grupo argamasillero mantiene una escuela municipal en la que ensayan 150 chavales, un número altísimo para tratarse de baile regional. Eso sí, en su inmensa mayoría son niñas, ya que este tipo de folklore continúa teniendo poco tirón entre los niños.
En La Solana, el grupo infantil trabaja desde hace años en busca de consolidar una cantera que asegure el relevo generacional con los mayores de la Agrupación “Rosa del Azafrán”. La labor está siendo muy intensa y hay más de 25 colegiales ensayando regularmente. Juanfran García-Abadillo y Toni Del Olmo conducen los ensayos, y también idean la metodología de trabajo con los niños, a los que es necesario motivar constantemente para que mantengan y acrecienten su amor por nuestro folklore más tradicional. Según Juanfran García-Abadillo “lo importante no es que tener muchos niños, sino que los que haya estén contentos y comprometidos”.