Jóvenes del Arciprestazgo "Mancha Este" en la caseta municipal                                  Foto: GACETA

Paulino Sánchez

  Numerosos voluntarios de las parroquias solaneras se encargaron de preparar la comida y atender después a los jóvenes llegados a las poblaciones del Arciprestazgo "Mancha Este" desde diferentes países y que celebraron en La Solana el día del arciprestazgo, primero con una comida de convivencia y, posteriormente, con un recorrido por diferentes templos de la localidad.

   La convivencia comenzó con la recepción a los voluntarios, llegados desde las poblaciones de Argamasilla de Alba, Tomelloso y Socuéllamos, a los que se unieron los de La Solana, que recibieron en primer lugar un tique para recibir la comida que les tenían preparada los voluntarios solaneros. La recepción se realizó en una zona del boulevard que une el Parque Viejo con el Parque de La Moheda.

  Posteriormente los jóvenes y sus acompañantes de las poblaciones indicadas se trasladaron a la Caseta Municipal, cedida para estos menesteres por el Ayuntamiento. Allí les entregaron la bolsa con la comida, en la que además de pan,  agua y otras viandas recogieron una ración de gazpacho, así como otra de caldereta,  distribuyéndose posteriormente en las zonas de arbolado tanto del parque viejo, como del boulevard y el parque de La Moheda.

  El encargado de dirigir la comida, Nicolás Jaime, declaraba que para el gazpacho había preparado 200 kilos de tomates, 100 kilos de pepinos, además de 24 kilos de cebollas, así  como el correspondiente ajo, comino, aceite y vinagre.

  Además Jaime, que tuvo la ayuda de cinco personas pertenecientes al grupo de mayores, elaboró una caldereta con 100 kilos de carne y otros alimentos, con lo que se prepararon 500 tapes  con la caldereta preparada para la degustación por los peregrinos.

   Pero además de las viandas del día del Arciprestazgo, señalaba Nicolás Jaime, que para la cena del día anterior, celebrada en el patio de la Casa de la Iglesia, había preparado un pisto con 40 kilos de tomates y 10 kilos de pimientos, así como seis tortillas de 20 huevos cada una de ellas, no quedando prácticamente nada por consumir.

  Una vez  realizada la comida los peregrinos del arciprestazgo realizaron un recorrido por diferentes templos de la localidad. En ese recorrido, según declaraba el sacerdote Oscar Casas, se les ofrecían distintos datos sobre la historia de esos templos y la incidencia que tienen en la vida de la localidad. Para ello se realizaron una serie de  escenificaciones en cada uno de los mismos, que corrieron a cargo de los voluntarios de la localidad.

   Así señalar que visitaron la Iglesia de San Sebastián, un templo de estilo mudéjar, que tiene un artesonado de ese estilo y unas pinturas murales renacentistas, habiendo sido declarada Monumento Histórico Nacional en el año 1982.

  Igualmente visitaron y dialogaron con la comunidad de Monjas Dominicas de Clausura, convento fundado en el año 1593, conociendo en palabras de las religiosas la labor contemplativa que desempeñan en la comunidad católica de la localidad.

  Otro de los puntos que visitaron fue la parroquia de San Juan Bautista de la Concepción, que en sus orígenes fue un convento de frailes trinitarios. Allí tuvieron conocimiento de la liberación de cautivos en tierras de sarracenos, que fue el origen de la mencionada orden, que incluso pudo rescatar en Argel al autor del Quijote Miguel de Cervantes.

  El recorrido finalizó en la parroquia de Santa Catalina, donde se realizó un curioso montaje, en el que se escenificó la historia del templo contando con la propia imagen viviente de la titular que se acercó a los jóvenes.

   En definitiva una intensa jornada la que vivieron los peregrinos de los diferentes países acogidos en el arciprestazgo, que en todo momento contaron con la atención de los voluntarios solaneros, que han dedicado muchas horas a la preparación de estas Jornadas Mundiales de la Juventud.