Así captamos el momento del gol que dio el triunfo al San Marino                             Foto: GACETA

    Aurelio Maroto
    El San Marino Evolution es el nuevo rey del maratón local de fútbol-sala. El domingo por la noche se impuso en la gran final a Los Galánticos por 2-1, gracias un postrero gol de doble penalti con el tiempo cumplido. El pabellón La Moheda se llenó para vivir una final plena de emoción y no exenta de polémica, pero marcada por un ambiente electrizante que volvió a demostrar el gran arraigo de este torneo veraniego en La Solana.
     El maratón, que alcanzaba sus bodas de plata, contó con la participación de 36 equipos, que comenzaron a jugar el viernes por la tarde en una fase previa. A medianoche comenzaron las eliminatorias definitivas a partir de treintaidosavos de final. Durante la madrugada del viernes al sábado, y sobre todo del sábado al domingo, el pabellón congregó a muchísimo público para ir viendo el desenlace de los partidos, con equipo de gran nivel sobre la pista. 
     El domingo por la mañana se jugaron las dos semifinales, y ambas se dilucidaron por penaltis, exhibiendo la enorme igualdad de los equipos en litigio. Por un lado, el San Marino derrotó al Muebles Los Pepotes tras empatar a 4 en el tiempo reglamentario. Por otro, Los Galánticos accedió a la final tras empatar contra La Farándula en otro partido igualadísimo. Incluso la final de consolación necesitó penaltis después de un empate a dos. El Muebles Los Pepotes se llevó el tercer puesto.
     Y la final respondió a las expectativas con creces. Sobre la pista dos equipos cuajados, aunque también fatigados. Los Galánticos capitaneados por el solanero Rafa Cortés, aunque con muchos jugadores de fuera. Y el San Marino con un equipo netamente local y algunos clásicos federados como Capelo, Araque o Víctor. Se adelantaron Los Galánticos y tocaban el título hasta que, a 15 segundos del final, Jose Casado empató para el San Marino. La prórroga fue de máxima emoción y ocasiones, aunque sin goles. En el último suspiro, una falta sobre Capelo provocó un doble-penalti, y con el tiempo cumplido, Chorras no falló y provocó el éxtasis en su equipo y en gran parte de la afición, que claramente apoyaba a los nuevos campeones.