Directivos de la Hermandad presentado los nuevos estandartes                   Foto: GACETA

         Aurelio Maroto

         La Hermandad de Santiago pretende engalanar el recorrido de la procesión del 25 de julio y convertir el desfile en un ejemplo de exaltación santiaguista. Para conseguirlo, acaba de presentar públicamente una novedad más para este año. Se trata de banderolas para adornar balcones, ventanas y conseguir que las fachadas particulares también luzcan ese sentimiento hacia el patrono de La Solana desde varios días antes de la feria.

         En rueda de prensa, la Hermandad explicó los detalles de esta innovación, que se une a las mejoras que han ido introduciendo en los últimos años. El presidente, Juan Rodríguez-Rabadán, comenzó recordando que el triduo al Apóstol se celebrará a partir del lunes día 18 de julio, habida cuenta que la inauguración de la feria se anticipa este año al día 21.

         El tesorero, José Díaz-Cano, fue el encargado de presentar la nueva banderola, no sin antes recordar que el objetivo de la Hermandad es “ir poco a poco”. Por eso, recordó que comenzaron colgando pendones en los pórticos, luego añadieron esos estandartes en las farolas de la Plaza Mayor, y el año pasado dieron un paso decisivo al recuperar la procesión tras 45 años de ausencia en el día del patrono.

         El encargado de la hucha pidió colaboración ciudadana cree que era el momento de “dar un paso más allá” introduciendo estas nuevas banderolas. Están concebidas para engalanar las fachadas, en especial balcones y ventanales. El estandarte incluye una gran Cruz de Santiago roja sobre fondo blanco, muy al estilo del resto de distintivos de la Hermandad. Se vende al precio de 25 euros, y se pueden adquirir directamente a través de los directivos. Díaz-Cano hizo especial hincapié en aquellos domicilios por los que pasa el desfile procesional y pidió a los solaneros involucrarse en esta celebración “queremos que la gente se vaya impregnando de este magnetismo y este ambiente santiaguista”.

         También se pueden adquirir el resto de objetos y enseñas, como los bastones de peregrino, las escarapelas, o las capas blancas para los niños. En este sentido, el presidente refrescó la memoria a propósito de la indumentaria de los participantes en la procesión “mujeres y hombres con camisa blanca y pantalón o falda oscura; los de la junta traje oscuro y corbata roja, y los niños con la capa blanca de raso”.

         En estos momentos, la todavía joven hermandad ya cuenta con 202 cofrades, una treintena más que hace un año.