Hilario Jiménez durante su charla Foto: GACETA
Aurelio Maroto
Los dolores osteomusculares asociados a la edad son generalmente irreversibles, pero tienen tratamiento y su evolución se puede ralentizar para hacer más llevadera la vida cotidiana del paciente. Con ese mensaje llegó a la Asociación de Mujeres el fisioterapeuta solanero Hilario Jiménez, que puso de manifiesto la necesidad de prevenir, sin duda la mejor medicina para este tipo de patologías. Más de medio centenar de socias acudieron a la charla, y tal fue su interés que las preguntas surgieron incluso antes de que el profesional entrase en harina. ¿Qué diferencia hay entre lumbago y lumbalgia? –preguntó una mujer a las primeras de cambio-.
En declaraciones previas a la prensa local, el fisio del Centro de Salud explicó la génesis de los dolores musculares, articulares o tendinosos, que en muchos casos termina en enfermedades crónicas de larga evolución como osteoporosis, artritis o artrosis, que acarrean problemas físicos y también psicológicos.
Hilario Jiménez no duda sobre cuáles son las claves para evitar o, en su caso, retrasar estas dolencias “la prevención lo es todo, y hay que basarla en la movilización y el ejercicio físico terapéutico, adaptado a cada caso”. De este modo –añadió- evitaremos procesos agudos y mejoraremos nuestra calidad de vida. Precisamente el estilo de vida, la alimentación y el lugar dónde cada cual habita influyen en estos procesos. Desde luego, una dieta sana y algo de ejercicio ayudarán bastante “lo máximo que podemos hacer es ralentizar los procesos”.
Salir a caminar, nadar en la piscina, algo de gimnasia… son terapias naturales que no debemos olvidar a la hora de hacer frente a esos molestos dolores musculares o de huesos. Alguna gente se refugia en la excusa de la falta de tiempo. En este particular, Hilario Jiménez lo tiene muy claro: “querer es poder”.