
Cigüeñas este domingo sobre el tejado del convento trinitario
Gabriel Jaime
La tarde del domingo en La Solana dejó una estampa tan inesperada como emocionante. Mientras se celebraba el tradicional Ofrecimiento a la patrona, la Virgen de Peñarroya, una nutrida bandada de cigüeñas irrumpió en el cielo de la localidad y acaparó las miradas de cientos de personas reunidas en la Plaza Mayor. Varios ejemplares sobrevolaron el corazón del municipio a media tarde, en un momento en que las terrazas hosteleras estaban repletas y el público participaba en el solemne acto religioso. El vuelo elegante de las aves provocó todo tipo de comentarios y alusiones, hasta el punto de que muchos desviaron su atención del Ofrecimiento para seguir con asombro el espectáculo natural.
Las cigüeñas hicieron escala en La Solana dentro de su peregrinación hacia el norte, en pleno ciclo migratorio. Algunos vecinos bromeaban diciendo que quisieron “saludar” tanto a la Virgen de Peñarroya como al popular Chatillo, acompañando desde lo alto la jornada festiva. El momento alcanzó su punto álgido cuando varias de ellas se posaron sobre la torre de la Parroquia de Santa Catalina, donde permanecieron durante un tiempo, regalando una imagen que fue ampliamente fotografiada por los presentes.

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Las cigüeñas y su viaje migratorio
La cigüeña blanca es una de las aves migratorias más conocidas. Aunque algunos ejemplares permanecen en España todo el año gracias a la abundancia de alimento, la mayoría desciende desde Europa hacia África para pasar allí los meses de invierno, regresando después hacia el norte en primavera y verano. Se trata de aves planeadoras que aprovechan las corrientes térmicas para avanzar, evitando el aleteo constante. Este detalle explica por qué suelen detenerse al caer la tarde: cuando el sol se esconde, el aire caliente deja de ascender y las cigüeñas no pueden continuar su vuelo. Retoman la marcha a la mañana siguiente, cuando el sol vuelve a calentar el terreno y se generan de nuevo esas corrientes ascendentes que les permiten planear largas distancias con poco esfuerzo.
La visita de estas viajeras del cielo convirtió el Ofrecimiento de este año en una jornada todavía más especial. Entre la devoción a la patrona y la inesperada escala de las cigüeñas, La Solana vivió un domingo para recordar.