El Cristo del Amor durante el Vía Crucis en el interior de Santa Catalina
Paulino Sánchez
Primera suspensión -y probablemente única- de los desfiles procesionales en la Semana Santa solanera de este 2022. La lluvia impedió la salir a la calle de la imagen del Cristo del Amor en el Vía Crucis habitual de la noche del Miércoles Santo, y se tuvo que celebrar dentro de la parroquia de Santa Catalina. Es el tercer año consecutivo en el que se suspende la salida a la calle de esta procesión, ya que los dos años anteriores tampoco se pudo celebrar debido a la situación sanitaria.
Varias horas antes del comienzo del Vía Crucis comenzó a llover, pero el seguía cayendo a las once de la noche, hora anunciada de salida, por lo que desde la parroquia y de acuerdo con la cofradía de la Vera Cruz, de la que depende el paso a procesionar, se acordó suspender el desfile. El rezo de las catorce estaciones se celebró dentro del templo, con el Cristo del Amor en su carroza junto a la Dolorosa, con las luces de la misma encendidas, así como otro foco que iluminaba el Cristo de la Agonía que se sitúa durante toda la Cuaresma en el altar mayor del templo. El resto de la nave permanecía a oscuras.
El párroco de Santa Catalina, Benjamín Rey, fue el encargado de comenzar y cerrar la estación de penitencia, mientras que el resto de las estaciones las rezaron los fieles desde el ambón del altar mayor, acompañados por cánticos al concluir cada una de ellas.
Segú nuestros datos, además de los dos años precedentes, este Vía Crucis tampoco pudo salir a la calle en los años 1972, 2011 y 2013.