Imprimir 

IMG 2128

      Los jugadores son conscientes de que la meta está cerca

        Aurelio Maroto

     Fue una tarde de contrastes en Valdepeñas. El empate del CF La Solana en el derbi comarcal llegó tras un final de partido chispeante, perfecto para dar lustre a un duelo que respondió a las expectativas, ya que las dos aficiones se volcaron con los suyos y el buen ambiente reinó dentro de la rivalidad. Para el equipo de Kiko Vilches, el empate supo mal porque acarició la victoria dos veces, primero gracias a Luque (m.80) y luego merced a Cabriti (mt.89), pero lo impidió el rocambolesco gol de Heredia en tiempo de prolongación.

      Sin embargo, la frustración por perder dos puntos sobre la bocina se amortiguó media hora después, cuando llegaron buenas noticias desde Quintanar de la Orden y la derrota del Pedroñeras. O sea, la distancia con el segundo se estira hasta los 10 puntos y solo quedan 8 partidos en disputa, de los cuales 5 serán en La Moheda.

      Decir que hay aroma de ascenso directo es decir la verdad. Para no ser campeón, La Solana tendría que perder cuatro partidos, o sea, tantos como los que ha perdido en toda la liga, contando con que alguno de los perseguidores haga pleno de puntos de aquí al final. Imposible, no. Utópico, casi.  Pero Kiko Vilches insiste en tener prudencia. En su fuero interno quizás reconozca que esto no se puede escapar, aunque de puertas para afuera no deja de apelar al mantra: “La consigna es no confiarse y seguir en la misma línea; veo demasiado optimismo y todavía queda mucho”.

El técnico toca con la punta de los dedos la cinta de una meta que él mismo se puso este verano. “Tenemos que ascender, sí o sí”, dijo en julio. Una apuesta de máximos que siempre acarrea riesgos. Los asumió con gusto, tal vez consciente de que la plantilla que construía era la mejor, en calidad y en cantidad. “Si conseguimos el objetivo, la clave va a ser la amplitud de plantilla que tenemos”, admitía tras el empate en Valdepeñas.

Y es que recuerda que el equipo llegó con muchas bajas, sobre todo en defensa (Sancho, Juan Santos, Josema y Samu), además de las ausencias de Javi López y Mini. Para colmo, Sergio Reyes se lesionó a los diez minutos y podría ir para largo. Así que el míster tiene razón cuando se refiere a la versatilidad y amplitud del plantel actual. “Seguimos sin perder en toda la segunda vuelta y los chavales se están sobreponiendo a las muchas bajas que tenemos”, dice.

Ahora vienen dos partidos consecutivos en La Moheda, Campillo y La Fuente. Vilches ya ha puesto en marcha la maquinaria psicológica para mentalizar a su equipo, consciente de que superar esos dos encuentros podría (casi) certificar el regreso a Tercera División. Toca esperar y, sí, ser cautos.

Usamos cookies para mejorar su experiencia en nuestra web. Más información en: Guía de uso de las cookies.

  Acepto el uso de las cookies en este sitio.