Alineación del CF La Solana el pasado 20 de febrero en La Moheda
Aurelio Maroto
El CF La Solana tiene la sartén por el mango para alcanzar su objetivo: el ascenso directo. Su victoria de este sábado en Manzanares (1-3), unida a la derrota del Pedroñeras en Criptana (1-0), despeja un poco más el camino. La distancia respecto a sus inmediatos perseguidores se estira hasta los 11 puntos a falta de diez jornadas. La lógica dice que los amarillos son los favoritos al título y su velocidad de crucero, con 7 victorias consecutivas, invita a amplificar esa sensación.
El triunfo en el gran clásico fue trabajado y terminó con un sesgo de polémica. El Manzanares salió más enchufado y apretó en la primera media hora, mientras La Solana aguantaba atrás y buscaba la proyección a la contra. Pablo de Haro adelantó a los locales, pero la reacción amarilla fue inmediata. Javi López volteó la tortilla en apenas 5 minutos y colocó el 1-2 al descanso. La segunda parte comenzó igualada, aunque poco a poco se vio más aplomo en el juego visitante y menos fuelle en el empuje local. Las ocasiones comenzaron a llegar, aunque hubo que esperar al minuto 77 para la sentencia de Reyes, que transformó un penalti sobre Cabriti.
Al margen de los feos episodios del final, de todo punto indeseables, subyace la realidad de una clasificación que encumbra al CF La Solana, al menos de momento. Sus 58 puntos revelan una marcha fantástica, con 19 victorias, 1 empate y 4 derrotas. Si nos remontamos a la temporada del último ascenso (2017-2018), el equipo de Kiko Vilches tiene 5 puntos más que entonces a estas alturas (24ª jornada), y uno menos que tenía el Calvo Sotelo, líder con 59, y a la postre campeón.
Sin embargo, hay otras cosas que llaman la atención de la trayectoria amarilla respecto a aquel año. La Solana basaba su éxito en la seguridad defensiva. En la jornada actual llevaba 14 goles en contra, cuatro menos que el líder. El portero era Manolo y en la defensa brillaban Sancho, Juan, Diego Sevilla o Juli. El paralelismo con hoy es evidente: 16 goles en contra, solo dos más. El factor diferencial hay que buscarlo en el ataque; ahí es donde se marcan distancias con el último ascenso. En la jornada 24, el equipo entonces entrenado por Manolo Sancho tenía 39 goles, por los 57 de ahora, dos más que la cifra final en liga (55). Una idea todavía más clara la tenemos en las cifras individuales de los artilleros amarillos, ya que el máximo goleador de la campaña 17-18, Crístofer, terminó la liga con 13 goles, por 10 de Naranjo y 9 de David Sevilla. En este momento, Sergio Reyes ya lleva 16 goles, por 7 de Javi López y otros 7 de Cabriti. Y todavía quedan diez jornadas por delante.
Es más, hace cuatro años el Calvo Sotelo terminó con 4 jugadores en el top-10 de goleadores del grupo: Cristian Gómez (20 goles), Sergio Reyes (19), Adri Rico (16) y Valdivia (13). Mientras tanto, Crístofer fue el undécimo máximo anotador con esas 13 dianas en 33 partidos jugados. Ahora, La Solana sí tiene a tres jugadores entre los 15 primeros de la lista, de los cuales Reyes es el segundo, a 3 tantos de Mauro, el pichichi momentáneo del Pedroñeras.
La conclusión es sencilla. El CF La Solana de la temporada 17-18 no era peor equipo que el Calvo Sotelo a un partido. De hecho, ganó en La Moheda (2-0) y empató en Puertollano (0-0). Pero sí era inferior a largo plazo, básicamente por su menor poder ofensivo, sin delanteros de gran producción goleadora que los mineros sí tenían. Ahora, la dupla Reyes-Javi López se ha consolidado como letal, capaz de deshacer nudos en partidos cerrados, como sucedió frente al Criptanense y el sábado en Manzanares, por citar ejemplos recientes. Y si alguno de los dos no está, aparece Cabriti (7) o aparece Luque (6). Además, la irrupción de chavales como Ángel (3) amplifican un poco más las muchas variantes de una plantilla amplia, compensada y de enorme versatilidad. Desde luego, Kiko Vilches tiene dónde y cuándo elegir. Y lo sabe.
Lo que suceda dentro de diez partidos es todavía una incógnita. Sin embargo, cada semana parece más claro cuál es el principal adversario del CF La Solana. Se llama CF La Solana. Solo un exceso de confianza, una vanidad mal gestionada, podría hacer descarrilar este tren. Sería imperdonable.