Imprimir 

-Paulino Sánchez.

  A la una del mediodía del domingo llegaba al altar de la Plaza de Toros la imagen de la Virgen de Peñarroya. Allí era recibida por multitud de personas que se congregaron para presenciar el momento en el que el alcalde abre el cochecillo, como es costumbre centenaria en la localidad.

   Pero ya desde el viernes comenzó el peregrinar de personas andando desde La Solana al Castillo, en cumplimiento de promesas muchos de ellos.

   Los actos oficiales comenzaron con la entrega de la imagen por la cofradía de Argamasilla de Alba a la de La Solana, mientras que por la tarde se  rezaba el rosario y se oficiaba la misa en el pórtico de la ermita.

   En la mañana del domingo la Virgen recorría la explanada del Castillo en el Rosario de la Aurora, oficiándose seguidamente la misa en el interior de la ermita por el párroco de Santa Catalina, Benjamín Rey.

   La llegada a La Solana era esperada por miles de personas, abriendo el alcalde Diego García Abadillo el cochecillo de viaje. En ese momento sonaba el Himno de La Solana y posteriormente el de la Virgen, interpretados por la Banda Municipal de Música, bajo la dirección de Ángel Sancho.

   En el traslado hacia la ermita del Humilladero la acompañaron caballos, tractores con remolque y fieles, que desfilaron ante ellas, antes de que fuera colocada en la carroza procesional en la que, por la noche era trasladada a la parroquia de Santa Catalina.

Usamos cookies para mejorar su experiencia en nuestra web. Más información en: Guía de uso de las cookies.

  Acepto el uso de las cookies en este sitio.