Paulino Sánchez

   El hasta el sábado diácono de la parroquia de Santa Catalina, José Luis Merino Lomas, ordenado sacerdote ese día por el Obispo en la Catedral de Ciudad Real  oficiaba el domingo su primera misa en la misma parroquia en la que, de momento, seguirá ejerciendo su ministerio.

   La primera misa del nuevo sacerdote en la parroquia solanera, contó con la presencia de numerosos fieles que llenaban el templo en el que concelebró con otros doce sacerdotes, figurando en los primeros puestos del templo sus padres y hermanas.

   La introducción de la celebración corrió a cargo del párroco Benjamín Rey, que destacó del nuevo sacerdote cualidades como su sonrisa que da paz, su timidez y su fidelidad sin equívocos, mostrándose muy  agradecido de poder seguir compartiendo con él las labores pastorales.

   Tras la lectura del Evangelio el nuevo sacerdote dirigía su primera homilía a los asistentes, teniendo palabras de agradecimiento para los sacerdotes que le acompañaban en esta misa, añadiendo que era un día para dar gracias, recordando datos sobre su entrada en el Seminario y su ordenación final. Agradeció a su compañero sacerdote Candelo la preparación para decir misa.

  Recordó lo difícil que en la actualidad es ser sacerdote y lo poco valorados que están en la actualidad, indicando que cuando algún sacerdote comete algún pecado es aireado constantemente en los medios de comunicación. Añadió que  cuando la gente dice que hay escasez de sacerdotes, quizás habría que preguntarse si en realidad lo que hay es escasez de cristianos, ofreciéndose finalmente a los feligreses solaneros donde, de momento, ha sido destinado.

    En el ofertorio le fueron presentados al nuevo sacerdote diversos presentes, desde un bastón para que se apoye en el caminar que le espera, a un libro de catequesis, además del pan y del vino.

   Antes de finalizar la misa era el sacerdote decano de los que realizan el ministerio en la parroquia de Santa Catalina, Candelo López, quien le recordó algunas frases de San Juan de Ávila sobre la misión del sacerdocio, matizando la importancia que tiene la presencia de José Luis en la parroquia que ha rejuvenecido la misma, incluso señaló que le había llegado a él personalmente, ya que lleva más de cuarenta años trabajando en la misma.

   Al finalizar la misa, que contó en la parte musical con el coro de la parroquia que interpretó diversos cantos litúrgicos, los asistentes ofrecieron un aplauso  al nuevo sacerdote, quien recibía la felicitación de los asistentes junto a los miembros de su familia.