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La ciudad

-Carlos Vermut explica al público solanero su nueva película - copia

Carlos Vermut se dirige al público en la presentación de su película

             Aurelio Maroto

            La Solana disfrutó de Carlos Vermut y Carlos Vermut disfrutó de La Solana. Al fin y al cabo, es su pueblo, el lugar donde pasó tantas temporadas de infancia y de adolescencia. De madre solanera, no olvida el olor de aquella casa. “Es el olor de La Mancha, tan característico, y tiene mucho que ver con mis recuerdos de adolescencia”. “Realmente, nunca me fui de La Solana”, declaró a los medios locales minutos antes de asistir en persona a la proyección de su última película, Mantícora. Se trata de una cinta con cuatro nominaciones a los Goya. Casi nada.

            Carlos López del Rey (su nombre real) colgó el cartel de ‘no hay billetes’ en la sala principal del Centro de Audiovisuales. “Es fantástico tener un cine así, y encima verlo lleno”, diría poco después en los prolegómenos de la proyección. El reconocido cineasta, que atesora galardones tan poco dudosos con una Concha de Oro a la mejor película (Magical Girl) y una Concha de Plata al mejor director, ha vuelto a primera línea con Mantícora. Reconoce que no es una historia de fácil digestión para los estándares comerciales, entre otras cosas porque no es un film comercial. “Es una película de amor, bastante retorcida, que habla de un tipo que lucha contra unos sentimientos que consideramos monstruosos”, sostiene.

Siempre ha dicho que hace el cine que más siente, no el que más vende. A la pregunta de si ese ‘retorcimiento’ de Mantícora tiene que ver con su propia forma de ser, matiza: “Yo no soy una persona retorcida, pero mi manera de crear sí”. “Le doy vueltas a las cosas del arte, no a las cosas de la vida”. “Soy un gran defensor de diferenciar el arte y la vida, y de que el arte sea un lugar donde podamos contar todo lo que queremos”.

-La sala colgó el cartel de no hay entradas

La sala del cine municipal colgó el cartel de 'no hay entradas'

Carlos Vermut es un cineasta hecho así mismo. Nunca tuvo ‘padrino’, y sin embargo ha logrado bautizarse. “Mi primera peli la hice por mi cuenta porque pensé que era demasiado rara para encontrar productora, reuní el dinero, simplifiqué al máximo la idea con una cámara y unos actores, y me siento orgulloso de aquella decisión”. Desde aquel Diamond Flash (2011), su trayectoria artística ha ido creciendo. En 2014 llegó Magicarl Girl y el éxito en Donosti, y en 2018 presentó Quién te cantará, que también tuvo hasta 7 nominaciones a los Goya.

A la espera de conocer el recorrido final de Mantícora, es taxativo cuando le preguntamos si cree que llegar a la cima sin tener grandes apoyos ni proponer un cine ‘mercantil’ tiene más mérito: “Sí; no vengo de familia de cineastas y me he dado cuenta de lo difícil que es hacer una película”. “Ahora siento que era un auténtico demente cuando me atreví a hacer la primera, pero ha merecido la pena; al fin y al cabo me gusta hacer cine”.

-Carlos

Un orgullo

Carlos Vermut fue recibido oficialmente por el director del Festival de Cine y Vino, Paco Romero, y por el alcalde, Eulalio Díaz-Cano, con el que comparte su segundo apellido: Del Rey. “En una entrevista descubrí sus raíces solaneras y un parentesco familiar que nos unía con el apellido”. “Es un orgullo tener un director referente en el panorama del cine nacional”, dijo el regidor.

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