La capitana Toni Galindo, entre el alcalde y la presidenta de la hermandad, cantando el himno de la patrona                     Foto: GACETA

         Paulino Sánchez

La nieve estuvo presente en los actos de despedida a la Virgen de Peñarroya en su marcha al Castillo. Una nevada obligó a modificar el traslado de la noche del domingo desde la parroquia de Santa Catalina a la ermita del Humilladero, y la nieve también apareció en la mañana del lunes.

La procesión estaba programa para las 8,30 de la noche del domingo, pero a esa hora la nieve caía intensamente sobre La Solana, por lo que tuvo que descenderse a la imagen de la carroza procesional y colocarla en el denominado “cochecillo de viaje”, en el que en años anteriores ya se bajó a la ermita del Humilladero ante la amenaza de la lluvia, concretamente en los años 2013 y 2015. Pero como era la nieve la que caía con intensidad, la Junta Directiva optó por el traslado en el carrillo tirado por un tractor, el mismo con el que se lleva por carretera al Castillo.

Directivos de la hermandad colocando el cochecillo de la virgen para llevarlo a El Humilladero                Foto: GACETA

El traslado se realizó, pese a las inclemencias meteorológicas, porque es preceptivo que la Virgen de Peñarroya pase su última noche en La Solana en la ermita del Humilladero, permaneciendo acompañada hasta la mañana del lunes por numerosos devotos en cumplimiento de promesas.

Ya en la mañana del lunes, tras el rezo del rosario y la celebración de la misa, la imagen se trasladó al altar de la plaza de toros, donde el alcalde, Luis Díaz-Cacho, cerró el cochecillo tras entonarse el Himno de la Virgen primero y luego el Himno de La Solana por la Banda Municipal. La joven capitana Toni Galindo Martín estrenó públicamente su cargo durante el pasacalles de despedida a la patrona. La nieve estuvo asimismo presente en tejados, coches aparcados y cayendo ligeramente del cielo.

El alcalde, junto al nuevo Mayordomo, pronunciando los 'vivas' antes de cerrar el cochecillo               Foto: GACETA

Con el rezo del rosario en la ermita del Castillo, la cofradía de La Solana deposita la imagen de la Patrona en su recinto hasta que en abril se traslade a Argamasilla de Alba, que asimismo la tiene por patrona, y en septiembre volverá otra vez a La Solana.