Mujer e hijos de Julián Simón al final del acto de homenaje
Javier Ruiz
Un acto cargado de emotividad, dignidad y respeto. Así fue el homenaje póstumo que el Ayuntamiento de La Solana dedicó este viernes al que fuera su alcalde entre 1983 y 1987, Julián Simón González. La pandemia impidió a muchas familias despedirse de sus seres queridos como era debido, sin la posibilidad de sentir la cercanía y muestras de dolor y pésame de amigos, vecinos y compañeros. Fue el caso de Julián Simón, que ahora ve así reconocida su labor como servidor público.
El auditorio de la Escuela de Música acogió este homenaje, presentado por Micael Tolosa, de Canal 2000TV, y que contó con la presencia de la esposa del homenajeado, Mari Loli López-Villalta, sus hijos Inma, Chelo y Julián, así como otros miembros de la familia. La representación municipal estuvo encabezada por el alcalde, Eulalio Díaz-Cano, junto a otros componentes de la actual y pasadas corporaciones municipales, además de compañeros, amigos y vecinos.
El acto estuvo amenizado por el pianista solanero Alfonso Candelas y se proyectó un video del protagonista, Julián Simón, recordando su paso por la alcaldía y algunos de los logros conseguidos durante su mandato. Seguidamente, se hizo entrega a la familia de un cuadro del artista local Antonio Delgado, una bonita pintura de la Plaza Mayor con la fachada del Ayuntamiento.
Julián Simón López-Villalta, hijo del homenajeado tuvo palabras de agradecimiento por organizar este acto
El hijo del homenajeado, Julián Simón López-Villalta, quiso dar las gracias al consistorio solanero y a la Corporación “por organizar este acto en memoria de mi padre”. Recordó que dedicó su vida a la enseñanza, empezando en política en las primeras elecciones municipales democráticas en 1979 primero como concejal, y concluyó su labor como alcalde en 1987. “Fue un gran padre, que se dedicó a la enseñanza y a su familia, un hombre tolerante y dialogante”.
El alcalde, Eulalio Díaz-Cano, que se dirigió a los familiares y asistentes, manifestó que Julián Simón dedicó toda su vida “a trabajar por los demás”. Lo hizo como maestro, como concejal y como alcalde del Ayuntamiento de La Solana, pero también como docente y director del colegio ‘Romero Peña’, donde procuró que varias generaciones se formaran y desarrollaran todo el potencial que su capacidad, esfuerzo y talento diesen de sí.
Cabe recordar que Julián Simón estuvo en el Ayuntamiento de La Solana durante 10 años, desde 1979 a 1989. Cuatro de los cuales lo hizo como alcalde y se alcanzaron importantes logros, ente ellos, la entrega de las primeras viviendas sociales, la puesta en funcionamiento de las lagunas de oxidación y lo que, tal vez, constituya uno de los éxitos más importantes para el pueblo, la puesta en funcionamiento del pantano de Vallehermoso, “Una obra que dio solución a uno de los problemas más graves y acuciantes que se tenían, como era la falta de un abastecimiento de agua en cantidad y calidad suficientes”, dijo el alcalde.
Díaz-Cano destacó las cualidades humanas de Julián Simón como político y como maestro, y aludió a que durante su mandato comenzó la andadura de la Semana de la Zarzuela. Finalizó poniendo en valor la trayectoria de “ese amigo, compañero, esposo y padre, que acredita un compromiso inequívoco por su pueblo, una vocación de servicio público fuera de toda duda y un gran amor por su profesión”.