El alcalde entregó los títulos durante el pregón Foto: GACETA
El Colegio Romero Peña durante el pregón Foto: GACETA
Paulino Sánchez
Aunque desde varios días antes fueron muchos los disfraces que se pudieron contemplar por las calles solaneras, el carnaval de forma oficial comenzaba en La Solana en la noche del viernes con el pregón a cargo del colegio Romero Peña y el nombramiento de carnavalero en la persona de José Luis Díaz Balmaceda, acto que tuvo lugar en la Caseta Municipal y que contó, como novedad, con la presencia disfrazados del alcalde y el concejal de festejos en la entrega de premios, que tuvo lugar en la Caseta Municipal.
La presentación del acto corrió a cargo de Juan Pedro Araque, quien tras saludar a los asistentes daba paso a un numeroso grupo de componentes del colegio Romero Peña, que desde el escenario se encargaban de ofrecer el pregón de este año.
Profesores, alumnos y padres del colegio, todos ellos disfrazados de diversos personajes, fueron los encargados de ofrecer un pregón en el que fueron alternando datos sobre el carnaval en la localidad, con algunos fragmentos de las murgas que, a lo largo de los años, habían realizado en los diversos carnavales en el centro. El alcalde, Luis Díaz Cacho y el concejal de Festejos, Luis Romero de Ávila, ambos disfrazados de cómicos, entregaron un plato de cerámica a los representantes del colegio.
El carnavalero durante la parodia Foto: GACETA
Seguidamente era el carnavalero de este año, José Luis Díaz Balmaseda, el que subía al escenario para recibir el título de Carnavalero. Al no poder dirigirse directamente a los asistentes, debido a una operación en la garganta, el carnavalero empleó una técnica en la que, a modo de ventrículo, manejó a uno de los muñecos de José Luis Moreno el popular Rokefeler, mientras que el discurso era leído por Mari Carmen Rodríguez Rabadán
Aludió a la situación en la que se encuentra España, señalando que los recortes ya han llegado hasta a su apellido, ya que en el programa editado se había puesto sólo José Luis Balmaceda, omitiendo que es Díaz-Balmaseda, señalando que “Hacienda antes se queda con las casas, mientras que ahora lo hacen incluso con los apellidos”. Recordó los carnavales de antes, así como a carnavaleros y locales de bailes, entre ellos el Cine Cervantes o la Discoteca Pelephan, que durante años dirigió el propio carnavalero.
El carnavalero del año anterior, Juan Díaz de los Bernardos, junto al alcalde y el concejal de Festejos, le entregaron el nombramiento de carnavalero, continuando con un baile para los numerosos asistentes que llenaban la Caseta Municipal, con música de los años sesenta, setenta y ochenta del pasado siglo.