

Dos imágenes de la fiesta romana en el CEIP Federico Romero Fotos: GACETA
Gabriel Jaime
El colegio Federico Romero se convirtió en una antigua civilización romana a través de una jornada de convivencia escolar que contó con la participación de toda la comunidad educativa. Profesores, alumnos y padres cambiaron la imagen del centro por un día con variados y divertidos talleres para todos los públicos.
La civilización romana ha estado muy presente este año en el proyecto común del colegio Federico Romero, habiendo realizado diversas actividades con dicha temática a lo largo del curso. Así lo indicó su directora, Aurora Jiménez, en el transcurso del festival romano celebrado en la mañana del domingo, poniendo el broche final al programa genérico que ha versado sobre la antigua Roma.
Destacó la participación de toda la comunidad educativa del centro para desarrollar los talleres repartidos por todo el colegio. Había un circo romano con diferentes juegos de la época, se elaboraron ramilletes de plantas aromáticas, se realizaron mandalas individuales y un mosaico colectivo con cápsulas de café y algunos aprendieron a bailar la danza de la tarantela, según explicó la directora. Además, hubo una exhibición de gallinas a cargo de la familia Torres Sánchez-Ajofrín y los padres también pudieron trabajar en el huerto del colegio.
El ampa ‘Alameda’ colaboró en las actividades y en la taberna instalada para esta ocasión donde se dispensaron refrescos, tapas y dulces que previamente habían preparado.
Una jornada de convivencia para darle vida al colegio con la complicidad de toda la comunidad educativa a pesar de celebrarse en un día no lectivo. Muchos de ellos acudieron ataviados con la indumentaria propia de los romanos, lo que ambientaba mucho más la actividad.