El presidente, Pedro José M-Zarco, destacó que estos encuentos fortalecen la cohesión interna de la entidad Foto: GACETA
Gabriel Jaime
La Cooperativa Santa Catalina ha celebrado este domingo su tradicional encuentro de hermandad con motivo de la festividad de su patrona, Santa Catalina. La habitual cena de años precedentes, se cambió por una comida a petición de los socios, que también pudieron probar algunas de las últimas creaciones vinícolas de la entidad.
El presidente de la cooperativa, Pedro José Martín-Zarco, explicó que el cambio de horario respondía a las demandas de gran parte de su masa social. “Estos años la veníamos haciendo por la noche y había gente que decía que se alarga mucho el tiempo”, señaló, justificando así la decisión de trasladar el encuentro al domingo a mediodía.
En declaraciones previas a la prensa local, el presidente anunció que habría dos reconocimientos especiales. Este año, los homenajeados fueron el socio Julián León, por su dilatada participación en el consejo rector, y María del Mar Luna, hija de socio y trabajadora de la Oficina Local Agraria, distinguida por su implicación con el sector. Martín-Zarco destacó que estos gestos fortalecen la cohesión interna: “Una comida de hermandad también hace cooperativa… compartir un tiempo entre socios, compañeros, amigos y vecinos es un acto social bastante bonito”.
Durante la comida, los asistentes pudieron degustar dos de los nuevos vinos de la entidad, aunque su presentación oficial tendrá lugar en diciembre en un acto organizado por el Ayuntamiento de La Solana, junto a otras bodegas locales. “Hoy vamos a ser los primeros en probar nuestro nuevo Galanes Airén y también ese producto que demandan los mercados con vinos de menos alcohol y burbujitas, como es el Bureo de Los Galanes”. Los tintos, por su parte, deberán esperar porque no se embotellarán hasta después de Navidad, según indicó,
El acto también contó con la presencia del concejal de Agricultura, Julián Díaz-Cano, que igualmente pronunció unas palabras antes del almuerzo. La sobremesa estuvo amenizada por el grupo local Al son celeste, con una actuación en la que interpretó los mejores temas de su repertorio.