La Solana hizo sus deberes y depende de sí misma Foto: GACETA
Aurelio Maroto
Todo se decidirá en la última jornada. El CF La Solana se jugará la promoción de ascenso a Tercera RFEF en Motilla del Palancar. Sin opciones matemáticas ya de ser campeón, el play-off sería un enorme premio para los amarillos. La buena noticia es que dependen de sí mismos para lograrlo. La mala, que jugarán esa batalla sin su goleador, Rodrigo Alves, que vio la quinta amarilla.
El equipo de Julián Falcón hizo sus deberes ante el San José Obrero (3-0).Rodrigo (de penalti), Marcos Talavera y Adrian Micue firmaron una goleada más que suficiente, aunque en un partido con poco brillo. Se trataba de ganar, y se ganó. Los conquenses no lo pusieron fácil de inicio, con una presión que dificultaba el manejo en medio campo. Aun así, no tardó en llegar la primera aproximación con peligro tras una buena combinación por la izquierda que finalizó Rodrigo con un disparo alto. La Solana percutía mejor a la contra, en oleadas tras robo de balón, que en ataque estático. En una de ellas, Iván Riveiro dibujó una asistencia marca de la casa a Marcos Talavera, que fue objeto de claro penalti cuando encaraba solo a Yousef. Alves no falló. Era el minuto 13 y el partido se ponía de cara. Y más se puso cuando Ruiz Corredor expulsó con roja directa al capitán visitante, Carlos Rufo.
Sin embargo, el partido siguió enredado en cuanto a fútbol. La Solana no encontraba espacios claros para penetrar, demasiado empeñada en jugar por dentro, y cuando lo hacía se encontraba con un inspirado Yousef. El San José apenas inquietó, eso sí, salvo un centro peligroso que se paseó delante de Manolo, por fortuna sin consecuencias. El primer tiempo acabó con un zapatazo de David Villar en volea, que se marchó arriba por muy poco.
Iván Riveiro pugna por un balón durante el partido Foto: GACETA
La segunda parte arrancó con más brío local. En el minuto 8, Marcos Talavera recibió dentro del área y se estrenó como goleador amarillo tras un disparo raso. Tras el 2-0, y dadas las circunstancias del partido, muchos aficionados comenzaron a preocuparse más por lo que sucedía en otros partidos, sobre todo en Malagón y en Tomelloso. Entonces llegó la amarilla a Rodrigo Alves en una jugada en el centro del campo y sin ningún peligro. El árbitro estaba encima y no dudó en castigar una patadita a destiempo. El brasileño no paró de lamentarse hasta el final del encuentro, pero no había vuelta atrás. Falcón dio entrada inmediatamente a Micue y Miguel, en busca de frescura por ambas bandas, y tal vez también para darles confianza y familiaridad con el juego. Ambos dejaron buenos minutos, incluso Micue hizo el tercero cuando el partido expiraba. Exactamente como sucedió siete días antes en Herencia.
El choque terminó con victoria clara y los rivales directos también ganaron, así que todo sigue igual. La diferencia es que solo queda una carta por jugar. La Solana viajará a Motilla, que no se juega nada, y el resto de rivales jugarán en casa ante adversarios en la misma situación. Pero eso de no jugarse nada solo es una frase hecha. En teoría, quien más complicado lo tiene es, precisamente, La Solana, por el hecho de jugar fuera y ante un buen rival. Eso sí, le vale con ganar.
“Moriremos por la camiseta de La Solana”
Al término del partido contra el San José Obrero, Julián Falcón advertía de que la batalla de Motilla será muy difícil, entre otras cosas porque su equipo llega castigado a este tramo final de liga: “La plantilla es corta y vamos viendo que el cansancio va haciendo mella”. Pero su mayor preocupación es no responsabilizar a sus jugadores más de la cuenta. “Ya están haciendo demasiado esfuerzo y lo único que puedo hacer es abrazarlos por lo que están haciendo”. “Tenemos una plantilla a nivel emocional muy inmadura todavía y no es bueno añadirles más presión porque jugarían hacia la evitación al fracaso; por eso tenemos que liberar al futbolista para que juegue de la misma manera que siempre”. “Nosotros no iremos a especular, sino a intentar ganar y salir a muerte para conseguirlo”. “Si algo tiene este equipo es energía y la afición tiene que estar segura de que vamos a darlo todo y que moriremos por la camiseta de La Solana”.