La imagen de San Cristóbal se adornó con flores naturales

Gabriel Jaime

Con la misa de campaña y la posterior procesión de camiones concluyeron los actos organizados por la hermandad de San Cristóbal para honrar a su titular. La celebración eucarística se celebró junto al parking de caravanas, mientras que el desfile procesional discurrió por un itinerario algo más sinuoso que en otras ocasiones.

La misa de campaña estuvo oficiada por el párroco de Santa Catalina, Benjamín Rey, y reunió a numerosos hermanos y público en general, según reconoció el presidente de la hermandad organizadora, Juan Alfonso Moya, a Radio Horizonte. La ceremonia comenzó a las nueve y media de la tarde, una hora que podría adelantar su horario en el futuro, según indicó. “La gente nos dice que termina muy tarde y la procesión sale más tarde todavía, así que estudiaremos la posibilidad de hacer algún cambio”.

Los camiones, aparcados junto al parking de caravanas, participaron en una sinuosa procesión

Seguidamente, arrancaría la procesión, encabezada por la imagen de San Cristóbal engalanada con flores naturales. Detrás marcharon casi cuarenta vehículos, casi todos pesados. “El número de participantes se mantiene, pero hay muchos que no pueden salir porque deben respetar los descansos del tacógrafo”, dijo el presidente. Moya reconoció que el recorrido presentó algunas dificultades. “Había obras en el itinerario y algunos coches estaban mal estacionados, por lo que tuvimos ciertos problemillas de circulación”. En cualquier caso, el presidente se mostró muy satisfecho con las celebraciones en general. Agradeció el trabajo de toda la directiva y la asistencia del equipo de gobierno, así como las colaboraciones de las firmas comerciales.

Conviene recordar que los actos comenzaron una semana antes con el tradicional concurso de maniobras en la explanada del ferial. Un total de 25 participantes, siete más que el año anterior, disputaron la prueba que se adjudicó Juan Serrano de la Cruz. El podio lo completaron Víctor Alhambra y Juan de Mata Díaz-Cano.