
La charla fue presentada por la concejala de Sanidad, María José Gª Cervigón Foto: GACETA
Aurelio Maroto
La Escuela de Familias de los institutos solaneros cerró el ciclo de este curso con una interesante charla sobre realidades, mitos y leyendas en el consumo de alcohol y sus efectos en el cerebro. Encuadrada en el programa Ciudad Ciencia, en colaboración con el Ayuntamiento de La Solana, esta vez se contó con la participación de investigador Salvador Martínez, que trabaja en el Instituto de Neurociencia del CSIC (Centro Superior de Investigaciones Científicas), con sede en Alicante.
La ponencia pretendía alumbrar sobre cómo incide el consumo de alcohol en la función cerebral y el experto no pudo ser más taxativo: “El mejor alcohol es el que no se bebe”, vino a decir. Negó el mito de que una copa de vino puede ser incluso beneficiosa para la salud, por no hablar de otras bebidas aún más dañinas. Insistió en la necesidad de educar para que el alcohol no forme parte de las reuniones sociales, o por lo menos no sea imprescindible como sucede hoy en día. Como neurocientífico e investigador, tiene claro que el consumo de bebidas alcohólicas es malo en cualquier cantidad, entre otras cosas porque afecta al cerebro. “Nos interesa saber cómo funciona el cerebro cuando generamos adicciones, y sobre todo si aún está madurando”. “Si nuestro cerebro no funciona bien, nosotros no funcionamos bien”, subrayó.

Salvador Martínez durante su conferencia Foto: GACETA
Pero también insistió en la necesidad de organizar charlas de esta naturaleza. Advirtió sobre el peligro de crear una sociedad sin esfuerzo, acomodada. “Les animo a que hagan cosas como única forma de vencer al gran problema de la acomodación”. Parafraseó a Voltarie cuando dijo que el trabajo elimina las necesidades, el aburrimiento y el vicio. “Tenemos que hacer cosas distintas que nos saquen de ese aburrimiento para evitar el vicio y crearemos cerebros mucho más funcionantes”.
Poca asistencia
Los organizadores de esta escuela de familias aprovecharon para quejarse de la escasa asistencia a las conferencias incluidas en el programa. Tanto el director del IES Modesto Navarro, Eladio Maleno, como la directora del IES Clara Campoamor, Chelo Simón, coincidieron en lamentar este hecho, ya que apenas un puñado de padres y madres han acudido a cada charla, a pesar del alto nivel de los ponentes y del indiscutible interés de los temas. “Por falta de ganas e ilusión no es, pero nos da rabia la poca asistencia que tenemos después de invertir tanto esfuerzo”, declararon a la prensa.