Aurelio Maroto

            Atrás queda una pretemporada con luces y sombras para el Doña Ramoncita-CB La Solana. Quizás más sombras que luces si nos fijamos solo en los resultados. Una victoria en Tobarra y una derrota en Iniesta, ante rivales del mismo grupo de Liga EBA, han servido para dejar claro que este nuevo proyecto tiene músculo, aunque también grietas. O sea, lo normal en una plantilla con la mitad de recién llegados. La parte positiva es que, más allá del perjuicio económico de no jugar determinados partidos de copa, nadie recordará nada cuando comience la liga, sobre todo si comienza bien. Por eso, la tropa de Mica y Fernando únicamente piensa ya en el viaje a Iniesta (Cuenca), un pequeño municipio de apenas 4.000 habitantes que debuta en Liga EBA.

            Así que borrón y cuenta nueva. Las decepciones veraniegas –sobre todo la derrota en Socuéllamos- son historia y no cuentan ya. Pero sí deben ser una ventana de claridad para el cuerpo técnico, que habrá visto mejor dónde cojean. “Algunas derrotas pueden venir bien”, decía Mica Tolosa tras caer en la Copa Diputación frente a un adversario de Primera Nacional. El técnico no oculta que el equipo anduvo espeso en ese partido, aunque tal vez marcó un punto de inflexión antes de la liga para diagnosticar dónde mejorar.

            “Están siendo días de mucho trabajo, de acoplamiento de muchos jugadores nuevos y ya podemos hacer alguna valoración”, ha declarado Mica Tolosa a Radio Horizonte. Recuerda que hay cinco jugadores nuevos y necesitan acoplamiento. “Estamos viendo dónde puede rendir más cada jugador y asimilar nuestro sistema de juego”. “Hay carga física de mucha exigencia y aún no estamos en nuestro mejor nivel, pero creo que vamos en una buena línea para llegar bien al inicio de liga”, insiste.

            Lamenta la lesión de Phillippe Correia, el nuevo center del equipo, que apenas ha podido participar por una lesión que, en principio, parece remitir. Aunque el pívot francés no llegará al debut liguero, el resto sí está disponible para la primera puesta en escena. “Creo que hemos formado un buen grupo, con jugadores que pueden aportar en diferentes facetas y tenemos un equipo compensado”, asegura.

            Este último fin de semana no ha habido bolo de pretemporada. Se ha preferido trabajar aspectos técnicos en la intimidad de los entrenos y afrontar la última semana previa a la competición con la máxima exigencia. El objetivo es llegar bien al debut en la pista del novato –pero peligroso- Basketas Academia Iniesta (sábado, 18,30 h).