
Representantes del festival Solrock con las autoridades en la presentación
Aurelio Maroto
La caseta municipal ultima los detalles para la celebración del festival Solrock, que cumple su decimosexta edición y se celebrará este sábado con acceso libre. Una cita que regresa con cuatro bandas y un repertorio diverso dentro del género roquero. Dos de esas bandas son solaneras, algo perentorio en un municipio con una honda historia en grupos de este tipo de música. Serán Grajo y Evasión en la Granja, que estarán acompañados por las bandas ciudarrealeñas Permadeath y Tiempos de Ira.
El festival ha sido presentado en el Ayuntamiento, que participa en la organización del evento. La concejala de Festejos, Ángela Notario, y su adjunto, Santiago López, se alegraron porque La Solana cuente con una enorme versatilidad en su patrimonio musical. “Somos un pueblo multicultural, porque lo mismo tenemos zarzuela que tenemos rock”, dijo. Y aprovechó para hacer un llamamiento a los aficionados: “Esperamos su asistencia, que se diviertan y disfruten con la música en directo”.
Pablo Ortiz, componente de Evasión en la granja, explicó que el objetivo es pasar una noche divertida, con buen ambiente y cargada de rock and roll. Cree que un festival tan veterano lo merece: “No es casualidad que sean ya dieciséis años de festival y ojalá que la gente responsa y esto siga adelante”. Aprovechó para hacer un somero recorrido por la trayectoria de las bandas participantes, con mención especial para Grajo. “Es una banda mítica, que hace un rock más clásico, tiene varios trabajos de estudio y ahí siguen; el mayor logro no es empezar, sino continuar”. En cuanto a su propio grupo, Evasión en la Granja, recordó que hacen punk-rock, llevan dos años y ya tienen una maqueta grabada en su propio estudio.
Respecto a las dos bandas de fuera, Tiempos de ira hace hardcore punk, un subgénero del punk. “Es una de las bandas más trascendentales de la provincia, también con varios discos grabados y videoclips grabados”, dijo. Por último, actuará Permadeath, que toca heavy metal. “Esta banda promete mucho y por eso hemos decidido que estén en esta edición”.
En la rueda de prensa también intervino Francisco Díaz, otro componente de Evasión en la Granja. Reconoció que se agradecen este tipo de festivales porque no es fácil organizarlos. “Ya no vale solo con tener una guitarra y ponerte a tocar, ahora hay que tener un montón de papeles y permisos para poder simplemente hacer un concierto”. “Que desde distintos ayuntamientos se apoyen estos eventos es algo que se agradece”.
En La Solana, Grajo es una institución a nivel musical. “Nuestra clave es que nos hicimos amigos y después nos hicimos músicos, pero lo primero es ser amigos y llevarse bien”, dijo Francisco Lara, uno de sus componentes. “Toni y Alberto eran hermanos, pero cuando entramos Modesto y yo nos acogieron como bien y ya llevo veintitrés años con ellos”. “Hemos evolucionado a medida que hemos ido aprendiendo; antes hacíamos canciones como más infantiles, ahora es una música más madura”.
“Tuvimos años muy buenos donde había muchos grupos en el pueblo, pero ahora solo quedan tres”. “Hacen falta locales de ensayo y hay muchos grupos se deshacen porque no tienen donde ensayar”. Mari Carmen Romero de Ávila, vocalista de Grajo, terminó agradeciendo al Ayuntamiento su disposición, imprescindible para sacar adelante conciertos de esta naturaleza. “Sin su apoyo y medios será muy complicado hacer este festival”.