Alumnos de la especialidad de percusión interpretando su partitura Foto: GACETA
Gabriel Jaime
Más de ciento sesenta alumnos y alumnas de la Escuela Municipal de Música y Danza participaron en el tradicional festival de Navidad que se dividió en dos jornadas. El teatro Tomás Barrera albergó las actuaciones que comenzaron con los educandos de danza el primer día y las especialidades instrumentales el segundo. El objetivo era no masificar el aforo del recinto, teniendo en cuenta la situación sanitaria.
Los peques de Música y Movimiento abrieron el festival Foto: GACETA
El coronavirus suspendió el festival del año pasado y condicionó la presente edición. La organización tuvo en cuenta el gran volumen de alumnado del centro y decidió repartirlos en dos actuaciones diferentes. “Entre los alumnos de danza y los de las especialidades instrumentales, además de los pequeños de Música y Movimiento, habrán participado entre 160 y 170 personas”, indicó el director de la Escuela Municipal de Música, Ángel Sancho, a la emisora municipal. “Si cada componente viene con tres o cuatro familiares, no cabrían en el teatro, y sería muy triste decirle a un padre o a un abuelo que no venga”, recalcó, por lo que realizaron dos jornadas diferentes.
El curso de guitarra también interpretó un tema navideño Foto: GACETA
Los cursos de danza interpretaron un variado repertorio de coreografías en las modalidades de clásica y española. Al día siguiente, correspondió el turno a las especialidades instrumentales, ofreciendo un programa con partituras muy navideñas. Títulos como ‘Jingle Bells’, ‘Concierto para la noche de Navidad’, o la archiconocida Marcha Radetzky, entre otras, fueron interpretadas por los músicos y ovacionadas por el público presente.