Logotipo del 40º aniversario de la Cooperativa 'Rosa del Azafrán'

         Aurelio Maroto

La Cooperativa del Pan ‘Rosa del Azafrán’ ha lanzado la imagen corporativa de su 40 aniversario. Bajo el eslogan ‘Si caminas acompañado, llegarás más lejos’, la entidad panadera celebra una efeméride que llega marcada por las limitaciones de la pandemia. De hecho, la Junta Rectora quería un acto presencial con sus socios, pero la situación no lo ha permitido. Se han distribuido pegatinas de bolsillo donde aparece el logotipo elegido, el eslogan citado y una imagen de cuatro niños caminando abrazados.

“Se trata de hacer un guiño a los socios, dejando claro que la unión hace la fuerza; significa que perteneces a una empresa donde lo que estás dando es lo que realmente vale y todo repercute en la sociedad”, ha dicho el presidente, Juan Ramón García-Abadillo, en declaraciones a Radio Horizonte.

El próximo 18 de septiembre se cumplirán 40 años exactos desde que el horno se encendió por primera vez para cocer pan en la misma ubicación de hoy, en calle Águila. Algo más de 500 socios, la mayor parte de La Solana y algunos de las vecinas localidades de Membrilla y San Carlos del Valle, mantienen con vida una empresa que nació con vocación de cooperativismo. “Se formó por que la harina estaba barata y el pan caro; desde ese momento el precio del pan comenzó a regularse”, recuerda el presidente.

En efecto, el papel de esta entidad, como sucede con otras de cualquier sector, sirve como cuerda de control y equilibrio de precios. La Solana es un municipio con mucho arraigo industrial en materia de panaderías y la Cooperativa ‘Rosa del Azafrán’ permite mantener a raya la oscilación de precios de un producto tan básico como es el pan.

Juan Ramón García-Abadillo admite que la situación es mejorable. “Podía ser mejor, pero ha habido años peores”, señala. Asegura que la cooperativa ha mezclado buenos momentos con otros más difíciles. “Viene una época buena y luego otra mala, siempre es así”. Un diente de sierra que apenas tiene efecto en la masa social, cuya cifra se mantiene ligeramente por encima de los 500 de forma casi invariable. La entidad reparte títulos de propiedad, que ahora pueden heredar todos los vástagos. El esfuerzo de modernización está siendo importante, como demuestra el nuevo sistema de pago por código QR y la paulatina reforma de las instalaciones.

El objetivo de la directiva es mantener la operatividad de la panadería, la estabilidad de una plantilla consolidada y, eso sí, buscar mayor complicidad de la sociedad solanera. “Nos gustaría tener más socios y que la gente comprendiera el valor de tener una cooperativa de esta naturaleza”.