Juani, María José y Lourdes, en Radio Horizonte Foto: GACETA
Aurelio Maroto
Volvían de comprar unas piruletas para los niños de la guardería de la parroquia donde trabajan como voluntarias una vez al mes, altruistamente. De repente, ven lo que parece ser un billete de 100 euros. Se miran entre ellas, cuchichean y se agachan. En efecto, es un billete verde y no está solo. Dentro hay otro de 50 euros. Las cuatro piensan lo mismo, que son falsos o que alguna cámara oculta enfoca. Pero no, son auténticos. Tuvieron la tentación de quedarse con el dinero, admiten con sinceridad. Pero la auténtica sinceridad fue entregar esos 150 euros a una patrulla de la Policía Local que andaba por la plaza del Cristo del Amor, uno de los enclaves más céntricos y concurridos de La Solana.
Así fue como Lourdes Candelas (20 años), María García (20 años), Juani Jaime (19 años) y María José Salcedo (19 años), vivieron un episodio que ha trascendido. No tanto por la cantidad económica como por el rasgo de honestidad. Las cuatro estudian sus grados en Ciudad Real y se reúnen en la citada guardería parroquial. Tres de ellas, Lourdes, María José y Juani, han contado a la emisora municipal, Radio Horizonte, su pequeña hazaña cívica. Los mismos agentes se sorprendieron. “Nos dijeron que no era nada usual”, dice María José.
En un reflejo de la picaresca social donde nos movemos, reconocen que mucha gente las ha tachado poco menos que de ‘tontas’ por no quedarse el dinero. “¡Os habéis pasado de buenas!, nos dicen”, recuerda Lourdes. Tal ha sido la presión que, según María José, “hasta te sientes mal por haber hecho lo que debíamos”. Sin embargo, Juani reflexiona con algo la mar de lógico: “Piensas en el disgusto que tendrá quien ha perdido el dinero y que a mí me gustaría que hiciesen lo mismo si me pasa a mí”. "Sabemos que hicimos lo correcto".
La Policía Local envió el suceso a los medios locales, que se hicieron eco el martes (el lunes fue festivo en La Solana). La esposa del hombre que había perdido el dinero lo escuchó en los informativos de Radio Horizonte y reaccionó de inmediato. Acudieron a Jefatura y demostraron que eran los dueños legítimos de esos 150 euros, ofreciendo datos precisos. Por la tarde fueron a casa de Lourdes, la que más conocían. “Llegó el matrimonio y su hijo y nos contó que ya daban por perdido el dinero”. “La mujer nos dijo que cuando lo oyó por la radio fue en seguida a la policía y se emocionó cuando le dijeron que lo habíamos encontrado unas chicas jóvenes”. “Te queda una íntima satisfacción personal”.
Precisamente a Lourdes le pasó algo parecido hace tiempo. Paseaba con su hermano por el campo y encontraron una bicicleta abandonada, aunque completamente nueva. Repitió la historia llevándola a la policía. En este caso, pasado el plazo legal sin reclamarla, se quedaron con ella.
"Cada joven es de una manera, pero como siempre ganan los malos existe una visión un poco equivocada de nosotros", lamenta María José. Casos así demuestran que las ovejas negras siempre son minoría en el rebaño.