El público lo pasó en grande con la divertida comedia

-Paulino Sánchez.

   Con la asistencia de 270 espectadores comenzó la temporada teatral en el Tomás Barrera de La Solana, con la puesta en escena de la obra “Una boda feliz”, dentro del programa Platea del Ministerio de Cultura, en colaboración con el Área de Cultura del Ayuntamiento de La Solana.

   Una puesta en escena en la que los espectadores pasaron un rato agradable, como se pudo comprobar en las carcajadas que a lo largo de la puesta en escena se escucharon en el patio de butacas.

   La obra en la que Enrique (Txabi Franquesa), soltero y mujeriego, va a heredar de una lejana tía. Pero para hacerse con la herencia tiene que casarse en menos de un año. Como no quiere renunciar a su vida llena de mujeres, le propone a su mejor amigo, Lolo (Agustín Jiménez) casarse con él para cubrir el expediente. Ese matrimonio de conveniencia, para lo bueno y para lo mal, se va a convertir pronto en una pesadilla.

Como declaraba otro de los actores del reparto, Santiago Urrialde, cara muy conocida por sus continuas apariciones en muchas series y programas de las cadenas de televisión, “se trata de una comedia muy divertida, en la que al final no se sabe quien es gay o quien no lo es”.