Manuel Infante, párroco del Convento                                        Foto: GACETA

Paulino Sánchez

El popular Día del bocadillo para recaudar fondos con destino al proyecto de Manos Unidas volverá a ser el centro de la campaña que organizan las parroquias de la Iglesia Católica de La Solana. Este año se realiza lleva por lema “Ho hay justicia sin igualdad”.

El párroco de Santa Juan Bautista de la Concepción, Manuel Infante, destacó que el eslogan va dirigido a dar a conocer la situación de la mujer en países del Tercer Mundo “donde su dignidad no está tan considerada, incluso en muchas ocasiones son las que actúan como sustento de las familias”. Infante recordó las actividades programadas, del 8 al 10 de febrero, muchas de ellas destinadas a recaudar fondos, pero otras a reflexionar sobre la situación en la que se encuentran los países subdesarrollados.

Dentro de las actividades para recaudar fondos, este año irán destinadas a dotar de material a una escuela en Nairobi, capital de Kenia, en África. Es el denominado “Día del bocadillo” en el que se centra la recogida de esos fondos, ya que se implican todos los centros educativos de la ciudad. Además de los voluntarios que se encargan de preparar los bocadillos, hay que destacar la colaboración que realizan los comercios y panaderías de la localidad, muchos donando la mayor parte del pan o del embutido. El párroco cree que se trata de “una especie de fiesta de convivencia entre muchas personas”.

Asimismo, recordaba que las colectas de las misas del fin de semana irán destinadas a la campaña, realizada conjuntamente por las localidades que integran los arciprestazgos de Mancha Este, en el que están incluidas las parroquias solaneras, además de las que integran Mancha Norte. Además de recaudar fondos, se quiere contar con otras actividades para hacer reflexionar a la gente “sobre los dones con los que Dios ha dotado al mundo y que están mal distribuidos”, haciendo un llamamiento a la participación, sobre todo colaborando en el día del bocadillo con la pequeña aportación de dos euros, que es pequeña pero grande para crear lazos de afecto y cercanía, en este caso con Nairobi.